Interacciones y consecuencias del consumo combinado de alcohol y cocaína: una actualización sobre el cocaetileno

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Fuente:

Pastor, R., Llopis, J. J., & Baquero, A. (2003). Interacciones y consecuencias del consumo combinado de alcohol y cocaína: Una actualización sobre el cocaetileno. Adicciones15(2), 159-164.

 

Resumen

Los pacientes que solicitan tratamiento por consumo de cocaína y abuso de alcohol, presentan peculiaridades respecto de los que sólo consumen cocaína. La ingesta de alcohol como detonante del “craving” y conducta de búsqueda compulsiva de cocaína, influye en haber una mayor perdida de control del consumo, más problemas sociales, más conductas de riesgo y antisociales. Hipótesis: la presencia de un metabolito denominado Cocaetileno, resultante del consumo simultaneo de alcohol y cocaína, podría explicar, la mayor toxicidad y compulsividad de estos episodios. Metodología: Se realiza una revisión de la literatura científica sobre las consecuencias de la interacción alcohol-cocaína. Resultados: La interacción metabólica alcohol-cocaína incrementa el potencial tóxico de ambas sustancias por separado. El cocaetileno actúa como tóxico per se. Su presencia en el organismo provoca mayor riesgo potencial en los consumo simultáneos de alcohol y cocaína. Existen concentraciones de cocaetileno más significativas cuando el alcohol se administra previamente a la cocaína. Los resultados de la investigación básica muestran que, gran parte de las diferencias observadas en la acción de ambas sustancias, cuando se ingieren conjuntamente, pudieran estar debidas a modificaciones en la farmacocinética de dichas drogas y a la potencial acción del cocaetileno lo que, sumado a las respectivas acciones del alcohol y la cocaína, podría ser la base de la mayor gravedad de los cuadros clínicos observados.

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Buenas noches, la experiencia desde mi lugar de atención a usuarios de sustancias, denota la misma dinámica, la combinación alcohol/cocaína, es un factor común en muchos de nuestros usuarios, y por lo que puedo apreciar, dicha dinámica inclusive tiende a ser algo "independiente" del contexto, aunque siempre existen criterios, condiciones, o situaciones/afecciones similares. En el caso de algunos usuarios que me tocó tratar en mi servicio, o a quienes aún sigo tratando, pude observar que la mayoría de los que consumen cocaína, también consumen alcohol para "minimizar" los efectos de esta y seguir consumiendo. Por otro lado, en otros casos, el alcohol sirve como "potenciador" de la ansiedad de consumo de cocaína, algunos pacientes inclusive mencionan que "si no consumen alcohol, no sienten deseos de consumir cocaína", por ello identificamos al alcohol como uno de los factores de riesgo. Y un último grupo, que refiere no necesitar consumir alcohol para consumir cocaína, antes ni después de consumir esta sustancia. Por supuesto que el abordaje que ofrecemos es integral y desde Psicología, trabajamos el establecimiento de metas, identificación de situaciones y factores de riesgo, recursos personales y familiares, y reestructuración ambiental, entre otras. Con respecto a las consecuencias de dicha combinación (cocaína + alcohol) como ya es sabido, van desde la despersonalización, hasta casos en los que el usuario tuvo que ser hospitalizado por convulsiones y otras complicaciones. Gracias por el espacio, un saludo cordial.

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Este tema siempre me ha llamado la atención pues considero que en muchas ocasiones se realiza la ingesta de ambas sustancias psicoactivas y las personas no se dan cuenta del riesgo al cual se está exponiendo. 

En las actividades colegiales de fin de año es bastante frecuente escuchar que los jóvenes consumen grandes cantidades de alcohol y una vez que termina la actividad les dan un pase de coca para hacer revertir los efectos del alcohol y poder regresar a sus casas como si nada hubiera sucedido. Esta situación es de atención importante, pues considero irresponsable exponer a nuestros jóvenes a estas situaciones.

Me gustaría saber si en otros países han observado o tienen información en relación a estas prácticas. 

Estoy muy de acuerdo con el compañero, también me llama la atención como van de la mano el consumo de la cocaína con el alcohol o el alcohol con la cocaína ya que algunos mencionan "consumimos varias rayas de coca y luego tomamos cerveza para disminuir la aceleración. o como menciona el compañero toman mucho alcohol y bajan el efecto con la cocaína, por lo general los jóvenes mencionan esa situación de consumo,También considero bastante preocupante. sin embargo en mi entorno a nivel colegio los padres supervisan sigilosamente la practica del famoso UPD

Concuerdo con ud compañero, sabemos que en Costa Rica es una practica frecuente y enterarse que el cocaetileno produce un incremento potencial de muerte repentina de 18 a 25 veces más que con la cocaína, no hace mas que alarmarnos en cuanto a lo que puede esperarnos en una población tan joven como la que estamos viendo y atendiendo en nuestro país.

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Otro aspecto importante que se presenta en los servicios de salud pública, está relacionado con lo que se menciona en el artículo, es real, las conductas violentas y antisociales, son comunes en la mayoría de los usuarios, en unos más que en otros, pues sabemos que también dependen de las diferencias individuales y del contexto. En ocasiones también el usuario se presta para el tratamiento del consumo de cocaína, porque siente las consecuencias severas de dicho consumo, tanto en él como en su entorno, pero le cuesta dejar de consumir alcohol, como mencioné, generalmente este es un factor de riego en la mayoría de los usuarios, para el consumo de cocaína e incluso en otros, de crack. Por ello, las estrategias que se establecen como plan de tratamiento son abordadas de manera integral. Saludos.

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Buenas tardes desde Costa Rica, con respecto a lo planteado en esta revisión se expone otra variable significativa que nos direcciona a una explicación más del uso de dos sustancias de manera simultanea y la exposición segun explican a mayores riesgos en todo lo concerniente a sus consecuencias, perdidas de control, compulsividad e intoxicaciones relacionadas a la presencia del este metabolito llamado "coca-etileno" y su realación con un potencial de acción mayor que el reportado en el consumo de las sustancias por separado.

El impacto del metabolito en mención sobre el organismo expone mayores consecuencias negativas,  explicando la premanencia en el organismo y su impacto en organos como: corazon, hígado, cerebro, entre otras. Todos estos hallazgo creo que son determinantes para el manejo que se puede dar en parte del los procesos terapeuticos, incluyendo esquemas farmacologicos que permitan el manejo de cuadros especificos.

 

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La experiencia con estas 2 sustancias me han permitido comprobar estos datos personalmente después de estar más de 10 años encadenado al consumo de múltiples sustancias psicoactivas. Ahora desde mi lugar de trabajo (Comunidad Terapéutica "Taller del Maestro") puedo percibir de otro ángulo los efectos que estas sustancias mezcladas producen en el organismo humano. 

Excelente dato lo del Cocaetileno respecto a la mayor toxicidad e impulsividad hacia el consumo de estas sustancias .

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Buen día, efectivamente esta investigación corrobora lo que se aprecia en la practica de brindar tratamiento psicológico a personas con problemas de consumo de drogas. Al igual que Marcelo Julián, en consulta, los usuarios refieren que consumen alcohol para minimizar efectos de la cocaína y seguir consumiendo; y referían que si no consumían alcohol, no mostraban interés por consumir cocaína. Esto me conllevó a centrarme en los factores de riesgo y la prevención de recaídas con un enfoque logoterapeútico, en los usuarios con esta problemática. Gracias a esta investigación, cuento con base cientifica para dar a conocer a los usuarios del daño que se hacen al combinar estas drogas.

Concuerdo con Eddy Alonso, en que estos conocimientos permitirá mejorar tanto el tratamiento psicoterapeútico como el farmacológico. 

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Buenos días, no estoy en el tratamiento y/o seguimiento directo de pacientes consumidores de drogas, ya que en el Puesto de Salud en donde me encuentro, Usf Arroyo Pora no acuden los consumidores para consultar y son pocos ya que estoy en Zona Rural, pero en mi experiencia, que nací y crecí en la Ciudad tengo conocidos, incluso vecinos de mi barrio, y estos comentan que consumen ambas drogas (Cocaína - Alcohol), por una cuestión de poder estar mas tiempo en las salidas, o sea prolongar mas los que ellos llaman la resistencia a emborracharse mas rápido.

Así mismo, de acuerdo a lo que manifiestan los jóvenes la mezcla de ambas sustancias lo hacen para poder  experimentar nuevas sensaciones y de mayor duración, debido a que el efecto de una sola droga ya no es suficiente para aquellos consumidores cuyo organismo ya ha desarrollado una tolerancia al efecto de una de las drogas consumidas, ya sea alcohol o cocaína.

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Actualmente es la práctica preferida por jóvenes y adultos tanto personas que habitualmente están en consumo y son nuestros pacientes , así como personas que ocasionalmente han consumido en alguna fiesta y certifican y aprueban como la mejor forma de emborracharse afirmando que jamás se emborrachan , esa es la excusa perfecta para que varias personas se inicien específicamente en este método de consumo. Lo atractivo de este método de consumo es que toman toda una noche y según ellos nunca se emborrachan. Esta invitación es la más peligrosa de todas ya que también se enganchan muy fácilmente.

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Buenas tardes, de acuerdo al material leído y las investigaciones realizadas se visualiza que en los últimos años ha aumentado considerablemente el consumo de sustancias combinadas, las cuales producen efectos mayores a los que produce el consumo de solo una sustancia, sobre todo este fenómeno se da en la población joven, lo que trae consigo además de problemas en cuanto a la salud física y mental, también aumento en situaciones que guardan relación con conductas violentas.

Buenas noches compañera, concuerdo con usted. La interacción entre ambas sustancias hace que se incremente su potencial tóxico ya que ésta interacción no sólo interviene en la degradación del alcohol sino también de la cocaína. Cuando el cocaetileno se encuentra en el organismo se ha podido relacionar con daño hepático, convulsiones, cardiotoxicidad e incluso letalidad. Los efectos mentales que produce esta sustancia son sensación de felicidad intensificada, aumento de la autoestima y confianza en uno mismo, agitación psicomotriz, agresividad, pérdida del contacto con la realidad entre otros, por ello podemos concluir que la coadministración de alcohol y cocaína produce un mayor deterioro en las personas que lo consumen de forma conjunta, además de tener consecuencias más graves en todos los niveles.

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Buenas noches, actulamente trabajo en un centro de salud mental cominutario y en los últimos años se ha visto que cada vez son más los pacientes que solicitan tratamiento por problemas de cocaína y que, además, simultáneamente a ello tienen un consumo abusivo del alcohol . La interacción metabólica del etanol y la cocaína da lugar a un nuevo metabolito denominado cocaetileno, el cual juega un papel importante en el aumento del placer y la toxicidad derivada del consumo de ambas drogas. Eso hace que produzca un aumento considerable de la euforia y duración de la misma, así como una disminución de la disforia por abstinencia a la cocaína, unido a consumos más compulsivos. Todo esto influye en una mayor pérdida del control del consumo, tener más problemas sociales y conductas violentas y de riesgo.

 

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Tanto el alcohol como la cocaína son nocivos para tu cuerpo, y la combinación de ambos es extremadamente peligrosa, incluso para un usuario ocasional. (Lo mismo ocurre con la combinación de alcohol y crack, la versión de la cocaína que se fuma). A medida que metabolizas la combinación de cocaína y alcohol, el hígado crea una sustancia tóxica llamada cocaetileno que viaja a través del torrente sanguíneo, lo que aumenta el riesgo de daño en el hígado, disfunción del sistema inmunológico, daño cardíaco y varios más. La cocaína también daña tu corazón porque acelera su ritmo cardíaco y eleva su presión arterial a niveles potencialmente peligrosos. Las investigaciones sugieren que la combinación de cocaína y alcohol es aún más cardiotóxica y puede elevar el ritmo cardíaco y la presión arterial más de lo que lo haría la cocaína por sí sola. Las consecuencias de esto podrían incluir un ataque al corazón o un paro cardíaco. La cocaína de alta pureza, que tiene menos ingredientes de relleno, brinda una dosis más alta de la droga en cada golpe, lo que aumenta los riesgos para tu cuerpo.

Las consecuencias de mezclar cocaína y alcohol pueden ser mortales, ya que el cocaetileno tiene una capacidad de provocar la muerte «18 veces superior» al alcohol o la cocaína por separado.

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En la práctica es muy frecuente que los cocainómanos refieran episodios de consumo de cocaína que están precedidos o se acompañan de etanol con el que pretenden aliviar los efectos como la ansiedad, agitación y psicosis, por lo tanto tratar de prolongar los efectos placenteros de la misma. Indiscutiblemente la presencia de este metabolito influye en una mayor pérdida del control del consumo y problemas de salud pública. Por lo tanto, la compresión de los efectos derivados del consumo de etanol y cocaína así como los mecanismos implicados en la toxicidad directa del cocaetileno, pueden ayudar a resolver los problemas tanto físicos como psicológicos ocasionados a raíz de dicho consumo.

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Me parece sumamente relevante mencionar que en muchos casos el alcohol pasa a ser un factor de riesgo, un estímulo condicionado para el consumo de cocaína. Es decir que algunos pacientes sólo sienten la necesidad de consumir cocaína por la intoxicación con alcohol. Mientras que en otros casos no es la necesidad o el antojo por consumir cocaína, sino la necesidad de disminuir los efectos del alcohol por los cuales se consume la cocaína, o al menos así inicia la adicción. Este artículo me parece interesante porque nos habla del mayor potencial tóxico que tiene esta combinación, el cómo puede llegar a incrementar el potencia tóxico que cada sustancia tiene por separado. Esto habla de un riesgo mayor por intoxicación y/o sobredosis al que los usuarios no saben que se están exponiendo. Sería importante incluirlo en psicoeducación en la parte del consejo breve. 

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https://www.lanacion.com.py/pais_edicion_impresa/2019/07/01/inicio-en-l…

Me llamo la atención este articulo, y me parece demasiado interesante, porque en el lugar donde estoy trabajando, Presidente Hayes en los últimos 2 años paso de la marihuana a la cocaína la droga mas abusada, y es notable en los pacientes que solo consumen cocaína una evolución más favorable en la recuperación que otros que tienen consumo con alcohol a la vez. LLegué a ver suicidios y con métodos muy efectivos y lo que tenian en común era el consumo de alcohol y cocaína previo al acto. Super interesante el artículo!

 

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La parte psicoeducativa  parece ser un aspecto primordial , pues la perspectiva que las personas pudieran tener sobre la combinación de ambas sustancias probablemente sea dispersa , si consideramos que algunas  personas utilizan la cocaína para "bajar " los síntomas del alcohol , podría parecer en primera instancia que "está regulandolos  " que por ende los efectos se están  controlando . Sin considerar el potencial de toxicidad que se está generando.

Desde este punto parece preocupante la poca divulgación acerca de esta práctica que parece  va en aumento. Por lo que la preparación para los profesionales de salud , para poder intervenir en esta práctica de consumo( que se torna más frecuente) ,  puede ser un factor escencial.

 

 

 

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Es de suma relevancia saber que la combinación de ambas drogas genera efectos todavía más dañinos en la salud que al consumirse únicamente alcohol o cocaína. Sería de interés explorar más lo que muchos comentan aquí que son los motivos por los que se llega al consumo de ambas sustancias (minimizar los efectos del alcohol o evitar emborracharse) y de ser posible realizar investigaciones en dónde se pueda encontrar porque no todos los consumidores de alcohol llegan a consumir cocaína (a pesar de que el consumo de alcohol parece ser un factor de riesgo para el consumo de cocaína).  

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Hola, buenas noches.

Me parece sumamente importante y de mucha utilidad la información que comparten en el foro, ya que el uso conjunto de ambas drogas cada vez es más frecuente. Nosotros como profesionales de la salud debemos estar informados sobre las prácticas, los efectos y los mecanismos que se involucran y hacen posibles las modificaciones orgánicas que producen dichas drogas por separado y en conjunto. Conocer tanto los factores de riesgo, la relación tanto funcional como en estructura de ambas drogas y lo que perciben los consumidores es fundamental. Por otro lado, problemáticas asociadas a dichas drogas como, por ejemplo, las conductas violentas y antisociales, son comunes en la mayoría de los usuarios, en unos más que en otros, pues sabemos que también dependen de las diferencias individuales y del contexto.

Agradezco mucho la información y el excelente trabajo. Saludos.

 

Buenas tardes, me encuentro de acuerdo con Kathya , esta información es muy importante ya que el consumo de múltiples sustancias se encuentra en aumento, y definitivamente debemos estar informador sobre esto y las consecuencias físicas y psíquicas de las administración conjunta de estas drogas, sobre todo el aumento de impulsividad y la violencia potencial.

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Buenas noches

En mi experiencia personal he notado que muchos jóvenes les gusta experimentar en conjunto la mezcla de cocaina con alcohol, ya que les gusta consumir grandes cantidades de alcohol y terminar en un estado inconveniente, es importante tener en cuenta esta parte, ya que gracias al consumo del alcohol deriva en la mayoría de los casos al consumo de la cocaina.

Muchas veces el consumo de la ya mencionada cocaina, es para bajar los efectos del alcohol y asi seguir consumiendo mas bebidas alcoholicas,

El consumo de estas dos sustancias nocivas en conjunto, a largo plazo puede causar grandes estragos en el cuerpo,

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Por tanto en conclusion

Considero que es indispensable orientar a las personas que son vulnerables en el consumo en conjunto de estas dos sustancias, ya que son nocivos para la salud,

Estimada Wendy

Comparto tu comentario, ya que me parece importante que una vez realizada la investigación, la acción debería ser la propuesta de socialización del tema y sus resultados con la finalidad de que la población tenga la posibilidad de adquirir esta información en beneficio de sus hábitos y aprendizajes alrededor del consumo de estas sustancias.

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By Karol Smith Almestar Adrianzén

 

Saludos desde Perú, cuando los chicos se ven envueltos en drogas es importante conocer qué mecanismo es responsable por el hecho de que el uso de una droga aumenta el riesgo de tomar otras drogas. Para tratamientos de rehabilitación es muy importante saber que el uso de alcohol y nicotina es un precursor para el consumo de cocaína, siendo ambas drogas legales y de relativo fácil acceso.

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buen  día , efectivamente existen pacientes  que  presentan  como factor desencadenante del consumo de cocaina , el previo consumo de alcohol  incrementando  los niveles de toxicidad  en el organismo; uno de los aspectos que considero importante indagar  a profundidad  los rasgos de personalidad  que puedan presentar los pacientes  de adicciones esto nos puede dar  luces sobre  este patrón de consumo,  así como también indagar sobre su dinámica familiar  

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Me parece bastante relevante el hecho de que se habla de esta combinación tan recurrente en el consumo de alcohol y cocaína, y como esto llega a ser para reducir los efectos de uno u otro. Creo que en muchas ocasiones se tiene esta idea, de que al consumir cocaína se contrarrestan los efectos del alcohol y no se mantiene alerta de las consecuencias reales que esta combinación esta teniendo en la salud. Como se menciona, claramente se están teniendo efectos más negativos y que pueden llegar a tener repercusiones irreversibles en el individuo.

Me parece que la psicoeducación del consumo y lo que conlleva el la combinación de estas sustancias es prioridad en estas personas que siguen consumiendo sin ver los riesgos, de igual manera, creo que sería pertinente saber a qué se debe este pido de consumo, indagar en los factores de riesgo y creo que sería bueno el poder incluir esta nombre que se da ¨cocaetileno¨ para no hablar de las sustancias y sus consecuencias  por separado.

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Definitivamente el consumo en conjunto de cocaína y alcohol va en incremento, repercutiendo gravemente en la esfera biopsicosocial de los individuos, incrementando así las consecuencias sociales, laborales, económicas y la participación en conductas de riesgo. Estos factores, generalmente son los que motivan a los pacientes consumidores de ambas sustancias a participar en una intervención, lo cual muestra la importancia de tener personal de salud capacitado que pueda brindarles una orientación de calidad. Un factor que me resulta interesante de abordar es que los consumidores entrevistados mencionan este grado de “obligatoriedad” en el consumo para poder controlar tanto los efectos inhibidores del alcohol, como los estimulantes de la cocaína, pero pareciera entonces que es una tendencia que se va transmitiendo entre los consumidores de alcohol o cocaína, lo que podría estar favoreciendo que se involucren en el consumo de ambas. Por ello, seria relevante cuestionarse ¿Qué acciones se deben tomar para detener esa comunicación poco informada entre los consumidores? y de igual forma ¿Sería importante que en la prevención universal se incluya información respecto a las consecuencias del uso conjunto de dos sustancias? (principalmente de la cocaína y alcohol, que es una problemática que va en aumento).

Sin duda, la divulgación de información respecto a esta práctica es necesaria.  

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Buenas tardes, saludos desde Ecuador, con respecto a la revisión planteada es muy interesante considerar el consumo de estas dos sustancias de manera simultanea siendo las dos sustancias tóxicas perjudiciales para el cuerpo y metabolizado en el hígado. Desarrollando cocaetileno provocando efectos mucho más potentes que los efectos que solo el alcohol o la cocaína producen. Con mayores efectos eufóricos para la aumentando el potencial de que un individuo continúe abusando de ambas drogas

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Saludos Cordiales

Importante estudio que visibiliza la compleja interacción metabólica entre el alcohol y la cocaína, resaltando el papel del cocaetileno como un producto tóxico adicional cuando se consumen ambas sustancias simultáneamente. Además, subraya la importancia de la investigación clínica para validar las hipótesis derivadas de los hallazgos científicos y así mejorar la atención médica relacionada con el abuso y la dependencia de estas drogas. Estudios como estos permiten que la información recabada  sea útil  no solo en el tratamiento , si no también en programas de prevención en cuanto a intervenciones con personas consumidoras, sobre todo en el contexto de fiesta.

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Saludos estimados miembros del foro.

En esta revisión de la literatura, identifico una muy frecuente práctica de consumo y relacionado cada vez mas en personas jóvenes, la asociación entre el etanol y la cocaína produciendo este efecto "cocaetileno"

Esta potenciación de los efectos tóxicos de ambas sustancias a desarrollado complicaciones cardiovasculares, hepáticas; por su metabolismo y neurológicas. 

Es de importancia como profesional de la salud, reconocer a esta asociación frecuente, educando los riesgos implicados, sobretodo que la administración previa de alcohol antes de la cocaína, aumenta las concentraciones de este efecto. Identificar a los pacientes que tienen mas riesgo a desarrollar esta tendencia, brindar tratamiento a las complicaciones desarrolladas y derivación a servicios  especializados que ofrecen mayor capacidad resolutiva y seguimiento.

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Buenos días,

Es muy importante esta información porque como sabemos hoy en dia esto afecta a las personas desde muy jóvenes, la combinación de estas dos sustancias puede ocasionar muchos daños tanto físicos, emocionales y sociales. Como personal de salud es importante conocer los efectos, factores de riesgo que llevan al usuario a consumir este tipo de drogas, en ocasiones los usuarios tiende a seguir el tratamiento pero si no cuentan con el apoyo de algún amigo, familiar pueden volver a recaer. El consumo de estas dos sustancias está asociado con una variedad de consecuencias negativas, que incluyen el aumento en el riesgo del uso serio de drogas más tarde en la vida, en los adolescentes un riesgo de accidentes, violencia, relaciones sexuales no planificadas.

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Este tema de gran interés me parece importante ya que aborda un aspecto crucial y poco conocido sobre el consumo de cocaína y alcohol. La información sobre el cocaetileno, resultado de la combinación entre cocaína y alcohol y como puede generar mayor toxicidad y compulsividad sugiere la necesidad de más investigaciones en este campo.

 

 

Estimada Margorie

Estoy totalmente de acuerdo, la información sobre el cocaetileno y las investigaciones que se realicen alrededor del tema, serán de total beneficio para la aplicación en programas de prevención y reducción de riegos y daños.

Saludos Cordiales,
Paola

Estimada Margorie, concuerdo con sus aportes. A más de eso, pienso que las futuras investigaciones sobre la temática nos aportarían una riqueza para comprender los efectos, el riesgo y la prevalencia de la combinación de estas dos drogas si lo hacemos con una perspectiva interseccional. 

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El artículo proporciona una visión esclarecedora sobre las complejas interacciones entre el alcohol y la cocaína, destacando el papel crucial del metabolito cocaetileno en la intensificación de los efectos tóxicos y compulsivos asociados con el consumo combinado de ambas sustancias. La hipótesis planteada sobre la influencia del cocaetileno en la mayor toxicidad y compulsividad de estos episodios parece respaldarse por la evidencia revisada.

La metodología de revisión de la literatura científica proporciona una base sólida para comprender las consecuencias de esta interacción, y los resultados destacan cómo la presencia de cocaetileno en el organismo puede aumentar el riesgo potencial de los consumos simultáneos de alcohol y cocaína. Es interesante observar que las concentraciones más significativas de cocaetileno se producen cuando el alcohol se consume antes de la cocaína, lo que sugiere una relación temporal importante en la potenciación de los efectos.

Las implicaciones clínicas de estos hallazgos son significativas, ya que ayudan a explicar la mayor gravedad de los cuadros clínicos observados en pacientes que consumen tanto alcohol como cocaína en comparación con aquellos que solo consumen cocaína. Además, la comprensión de las modificaciones en la farmacocinética de estas drogas y la potencial acción del cocaetileno proporciona un marco útil para abordar estos problemas desde una perspectiva terapéutica.

En resumen, el estudio resalta la importancia de considerar las interacciones farmacológicas y los metabolitos en el diseño de estrategias de prevención y tratamiento para el consumo combinado de alcohol y cocaína, ofreciendo una base sólida para futuras investigaciones y prácticas clínicas.

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Buenas tardes, excelente aporte, mediante este artículo, se genera evidencia y además se puede notar, que el alcohol constituye una puerta de entrada a otros tipos de drogas, como es el caso de la combinación de alcohol y cocaína, de la cual se desprende esta mortífera interacción formando este metabolito que logra generar mayor toxicidad en nuestro cuerpo, generando de esta manera un mayor consumo de estas dos sustancias.

Al considerar al alcohol como una droga local, junto con las condiciones sociales, se propicia mayor consumo en nuestra sociedad.

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Al analizar los resultados de esta revisión se muestra la necesidad de abordar de manera integral el tratamiento de pacientes con consumo de cocaína y alcohol, considerando tanto los aspectos farmacológicos como los psicosociales, de tal forma que se pueda abordar adecuadamente los riesgos asociados a estás sustancias y promover una recuperación exitosa.

Estaría interesante explorar cómo estos hallazgos pueden influir en las estrategias de prevención y educación sobre el consumo de drogas en diferentes grupos ya sea edad, etnia o a su vez en el hábito socioeconómico, especialmente entre los jóvenes, quienes a menudo son más propensos a experimentar con múltiples sustancias.

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Es importante conocer el alto riesgo y el incremento del potencial tóxico de cada una de las sustancias cuando se consumen de manera conjunta, es decir la combinación de alcohol y cocaína puede ser extremadamente peligrosa ya que podría causar efectos graves a nivel físico y cognitivo. 

Según la investigación cuando se consumen las dos sustancias juntas, cada una incrementa el nivel de toxicidad por separado. Por lo tanto, el cocacetileno es probable que produzca convulsiones, cardiotoxicidad, daño hepático, repercusiones en el sistema inmunitario y letalidad. Además afecta la contractilidad del miocardio en mayor medida que la cocaína.

El dato que principalmente llamó mi atención es que el riesgo potencial de muerte súbita por consumo de alcohol y cocaína se incrementa de 18 a 25 veces respecto al de la cocaína. 

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El artículo condensa las investigaciones que se han realizado sobre la interacción y combinación de alcohol con cocaína, lo cual nos da una idea de los efectos y los riesgos presentes en las personas que las usan simultáneamente. Considero que el exponer los datos (como edad, sexo, clase social, etnicidad) sobre las poblaciones en las que se realizaron estos estudios, nos permitiría entender con mayor profundidad lo expuesto y a su vez pensar en la prevalencia de su uso en distintas poblaciones. Sin embargo, los datos son enriquecedores y dan paso al planteamiento de nuevos estudios donde se indague sobre los efectos del cocaetileno. 

Estoy de acuerdo en que el artículo proporciona una valiosa síntesis de las investigaciones sobre la interacción entre el alcohol y la cocaína. La comprensión de los efectos y riesgos asociados al consumo combinado de estas sustancias es crucial para el desarrollo de estrategias de prevención y tratamiento efectivas.

Incluir datos sobre las poblaciones en las que se han realizado estos estudios, como edad, sexo, clase social y etnicidad, sin duda enriquecería el análisis. Esta información permitiría comprender mejor las características de las personas más propensas a consumir estas sustancias juntas y los factores socioeconómicos y culturales que pueden influir en su consumo.

Es importante destacar que la prevalencia del consumo combinado de alcohol y cocaína puede variar significativamente entre diferentes poblaciones. Esta información es fundamental para diseñar intervenciones específicas y adaptadas a las necesidades de cada grupo.

Al igual creo que los datos presentados en el artículo abren la puerta a nuevas investigaciones sobre los efectos del cocaetileno. Es necesario profundizar en el conocimiento de este compuesto tóxico y su impacto en la salud física y mental de las personas que consumen alcohol y cocaína de forma conjunta.

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El consumo combinado de alcohol y cocaína representa una grave amenaza para la salud pública debido a las peligrosas interacciones sinérgicas que se producen entre estas sustancias, potenciando significativamente sus efectos nocivos y aumentando el riesgo de toxicidad hepática, cardiovascular y neurológica. La formación de cocaetileno, un compuesto tóxico producto del metabolismo del alcohol y la cocaína, intensifica aún más los daños a la salud.

Esta mezcla explosiva también incrementa la probabilidad de desarrollar dependencia a ambas sustancias, conduce a comportamientos impulsivos, agresivos y de alto riesgo, y exacerba los síntomas de trastornos como la depresión, la ansiedad y la psicosis. Factores como el consumo previo de alcohol, antecedentes de adicción y problemas de salud mental aumentan el riesgo de caer en esta peligrosa práctica.

Para combatir este problema, es fundamental educar a la población sobre los riesgos del consumo combinado, desarrollar programas de tratamiento integrales y especializados, y reducir la accesibilidad a estas sustancias. Solo a través de un enfoque integral y preventivo podremos proteger a las personas de las graves consecuencias del consumo combinado de alcohol y cocaína y construir un mundo libre de adicciones.

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El consumo simultáneo de alcohol y cocaína está en aumento y representa un grave riesgo para la salud física y mental. Esta práctica produce una serie de efectos adversos más severos que el consumo de cada sustancia por separado. La interacción entre el alcohol y la cocaína genera cocaetileno, un metabolito tóxico que tiene consecuencias devastadoras en el organismo.

En el sistema cardiovascular, se observa un aumento significativo en el riesgo de ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares, arritmias e incluso la muerte súbita. Además, la vasoconstricción causada por ambas sustancias daña las arterias, dificultando el flujo sanguíneo y aumentando la presión arterial. El cocaetileno también incrementa la frecuencia cardíaca y la contractilidad del corazón, sobrecargando el músculo cardíaco y aumentando el riesgo de caída.

En el sistema nervioso, se presentan alteraciones graves del estado de ánimo, como ansiedad, paranoia, psicosis y depresión, así como convulsiones, temblores y movimientos involuntarios. El consumo combinado también puede causar daño cerebral permanente, pérdida de memoria, disminución de la capacidad cognitiva y aumentar el riesgo de trastornos mentales graves como la esquizofrenia. Otros sistemas del cuerpo también se ven afectados, incluyendo el hígado, los riñones, el sistema respiratorio, el sistema inmunológico, los dientes y las encías, así como el sistema.

Es importante menciona que el consumo y dependencia de cocaetiletileno se altera por completo el estado de la Salud, físico mental y social por eso es importante abordar al individuo como un ser biopsicosocilal.

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Totalmente de acuerdo con la importancia de considerar el alcohol como un factor de riesgo en el camino hacia el consumo de otras drogas más potentes, como la cocaína. El concepto del "efecto de puerta de entrada" es esencial para entender cómo las sustancias que socialmente se perciben como menos dañinas pueden abrir la vía hacia adicciones más severas.

Es crucial también considerar los factores ambientales y personales que llevan a una persona a utilizar estas sustancias como método de afrontamiento o escapismo. ¿Crees que en la psicoeducación se debería poner más énfasis en el entorno social y familiar del individuo? Además, sería beneficioso integrar programas que no solo se centren en el conocimiento de los riesgos, sino también en la construcción de redes de apoyo y habilidades de resiliencia personal.

Por último, sería interesante discutir más sobre las políticas públicas y cómo estas podrían moldear mejor las estrategias de prevención, especialmente en contextos donde el alcohol está tan arraigado culturalmente. ¿Tienes alguna idea sobre cómo podríamos abordar estos desafíos a nivel comunitario o nacional?

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El consumo de drogas licitas como ilícitas en el mundo se hace evidente donde el acceso inicial a drogas licitas como el alcohol se va minimizando y la población busca drogas mas fuertes y efectos mayores llegando al consumo de "cocaetileno". La sociedad distingue solo a las drogas ilícitas como "malas", pero se debe recordad que el inicio fueron las drogas licitas ya que su expendio y consumo son a nivel mundial de gran acceso, fomentando problemas mentales desde el inicio de su consumo legal y se hace evidente de problemas mentales cuando se realiza el consumo de drogas ilegales repercutiendo en la familia y el individuo 

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El consumo de cocaetileno altera completamente el estado de la salud física y mental, donde el inicio y dependencia de este tipos de drogas es en etapas de juventud que pueden ser perjudiciales para la adultez y adultez mayor donde la toxicidad afecta notablemente la función hepática,  el sistema cardiaco y es letal; por lo tanto es riesgo potencial de muerte súbita por consumo de alcohol y cocaína además el uso/abuso de ambas sustancias se ha relacionado con déficits cognitivos en memoria, atención, orientación y asimetrías sensoriales por lo que se altera completamente la salud del ser humano.