A message from ISSUP

COVID-19. started from the neighboring  country of our beloved land Pakistan as a nightmare  and proved itself a true pandemic. Initially   things was under control in Pakistan because  north  border and flights from china was stopped  by both govts. But there was a breach in the western  border from where many hundred and thousands positive cases reached this land. And safe country polluted  by the dangerous  creature. Currently situation is that cases are increasing  day by day still with a rate lower  than any other country. A national  level medical emergency  has been declared  by Govt and whole medical and law enforcement  agencies  are working with full blow. Things done by govt  are more than expected at present being poor economy country but the public  response is sluggish. People  don't know how big threat is this and how bad impacts  it can cause on the population.  Death rate is low still but a danger  is suspected  continuously on every one's  head. Lets hope for the best and wait for this nightmare to be ended soon. May Allah  protect whole of the earth with His mercy.

La pandemia por COVID-19 se consolido como uno de los desafíos mas grande en el ámbito de la salud mental a nivel mundial. En primer lugar, se observo un aumento significativo en los niveles de ansiedad y estrés debido a la incertidumbre sobre la salud, el empleo, la economía, el futuro y el confinamiento. La preocupación por el contagio, la seguridad de los seres queridos y las restricciones impuestas han contribuido a esta situación.

Además, la pandemia exacerbo la depresión en muchas personas. El aislamiento social, la pérdida de rutinas y actividades sociales, así como las dificultades económicas, aumentaron el riesgo de depresión. Sin mencionar el trauma y el duelo experimentado por aquellos que perdieron a sus seres queridos debido al virus. La imposibilidad de despedirse adecuadamente debido a las restricciones sanitarias fueron agravantes para el proceso de duelo y ha generado un profundo dolor y trauma en muchas personas.

De igual manera, se evidencio un aumento en los trastornos relacionados con el consumo de sustancias debido al estrés y la ansiedad asociados con la pandemia. El aumento en el consumo de alcohol, tabaco u otras sustancias como mecanismo de afrontamiento aumento el riesgo de adicción.

Las personas con trastornos de salud mental preexistentes también enfrentaron desafíos adicionales durante la pandemia. El estrés adicional y la interrupción de la atención médica regular pueden provocar un empeoramiento de los síntomas.

Por último, los grupos vulnerables, como los trabajadores de la salud, los trabajadores esenciales, los pacientes crónicos, los adultos mayores, los niños y las personas con discapacidad, enfrentaron desafíos específicos en su salud mental debido a las demandas y riesgos asociados con la pandemia.

Bajo mi criterio, en conjunto estas condiciones, llevaron a que hoy en día se cree conciencia sobre la importancia de cuidar la salud mental y ofrecer acceso a servicios de apoyo psicológico. La atención a la salud mental debe ser parte integral de la respuesta global a la pandemia por COVID-19, con la implementación de medidas que aborden estos desafíos y proporcionen recursos efectivos para ayudar a las personas a afrontarlos.

Buenos días, desde el año 2019 que se produjo la pandemia por COVID-19,  la salud mental se ha visto afectada en sobremanera en la población en general, uno de los causales mayores el confinamiento como medida preventiva para evitar contagios y futuras complicaciones graves que ponían en riesgo la vida, afectado a la población de la tercera edad, personas que tenían comorbilidades; las actividades rutinarias de la gente ya no se realizaban, economía afectada, lo que generó un incremento de estrés, ansiedad,   depresión, violencia doméstica, duelo por la pérdida de familiares y otras afectaciones de salud mental llegando a ser la más grave el incremento de número de suicidios.  

Para las personas que trabajamos en salud mental, fue un reto el poder manejar el incremento de alteraciones de salud mental, y combatir al mismo tiempo al virus presente en los diferentes hospitales ya que no se contaba con protocolos establecidos para el personal de salud, en varios hospitales los implementos para el equipo de protección se escasearon, no se tuvo capacitaciones para la correcta colocación del mismo, lo qué genero el contagio de varios médicos, enfermeros, auxiliares etc, generando en esta población mayor carga de estrés,   crisis de pánico, ansiedad, actualmente ansiedad generalizada,   en algunos casos estrés postraumático que hasta hoy se manejan en consulta.

Al analizar estos últimos años, creo se ha dado mayor importancia a la salud mental, ya que preservarla se ayuda al individuo en su forma, de sentir, pensar, actuar, mejora la relación con otros, y se puede ayudar en las diferentes morbilidades mentales que existen posterior a este periodo que afectó al mundo. Se debe priorizar y hacer parte de todas las instituciones el hecho de que pueda haber apoyo psicológico, psiquiátrico y de toda la red de apoyo de trabajadores de salud mental y no minimizar sus efectos cuando es bien realizada.  

La pandemia de COVID-19 ha tenido un impacto profundo y devastador en la salud mental de las personas en todo el mundo. Desde el inicio de la crisis sanitaria, se han reportado incrementos alarmantes en los niveles de ansiedad, depresión y estrés postraumático, afectando tanto a quienes ya padecían trastornos mentales como a aquellos que no tenían antecedentes previos de problemas psicológicos.

La pandemia de COVID-19 ha puesto de relieve la interconexión entre la salud física y mental. Como profesionales de la salud, debemos abogar por un enfoque holístico que reconozca la importancia de la salud mental en el bienestar general. Al hacerlo, no solo ayudaremos a aquellos que sufren en este momento, sino que también construiremos una base más sólida para la salud mental en el futuro. La recuperación de esta crisis no solo depende de la atención médica, sino también de nuestro compromiso colectivo de cuidar y apoyar a cada individuo en su camino hacia el bienestar.