Dentro de la investigación que examina las experiencias adversas de la infancia, el trío tóxico describe el riesgo de abuso y negligencia infantil derivado de la exposición de un niño a la violencia doméstica, problemas de salud mental de los padres y/o discapacidad del aprendizaje, y el uso indebido de sustancias parentales.

En esta revisión sistemática, los investigadores examinan las pruebas que sustentan el "trío tóxico" en la política y la práctica de protección de los niños.

A pesar de la medida del "trío tóxico", que se utilizaba regularmente para identificar el riesgo en la práctica de protección de la infancia, los investigadores encontraron evidencia que era "débil y carente de precisión, detalle y profundidad".

Hubo poca investigación que evidenciara los factores causales o la interacción dinámica entre factores, y rara vez se definieron conceptos clave, como la enfermedad mental.

Los investigadores encontraron poca evidencia de servicios que ofrecen apoyo o si la disponibilidad de recursos sociales, económicos y ambientales podría influir en el impacto de los factores en el maltrato infantil.

En general, estas constataciones sugieren que la base de pruebas para el "trío tóxico" no es lo suficientemente adecuada como para justificar su protagonismo en la conformación de la política y la práctica de la protección de la infancia.

Los autores instan a futuras investigaciones a abordar las lagunas en la literatura con el fin de obtener una comprensión detallada de la interacción entre estos factores.