Cómo el monitoreo de aguas residuales puede aumentar la preparación para nuevas amenazas para la salud
Objetivo: explorar el análisis de aguas residuales como metodología que contribuye a la preparación y respuesta de la UE
Antecedentes: La COVID-19 ha llamado la atención de Europa, y de todo el mundo, sobre la importancia de estar preparados ante posibles emergencias. Las metodologías de vigilancia mejoradas e innovadoras son el núcleo de las medidas basadas en la investigación adoptadas para responder a las posibles amenazas.
La epidemiología basada en las aguas residuales (WBE, por sus siglas en inglés), también conocida como monitoreo de aguas residuales o vigilancia de aguas residuales, solo comenzó a ganar terreno como herramienta epidemiológica a principios del siglo XXI con una amplia gama de aplicaciones, pero siguió siendo conocida solo por un grupo relativamente pequeño de especialistas. Sin embargo, en 2020, la pandemia de COVID-19 catapultó a la WBE a la atención general y demostró lo poderosa que podía ser una herramienta de salud pública.
Hace más de una década que el OEDT está explorando el análisis de las aguas residuales municipales en busca de medicamentos y sus productos metabólicos para estimar el consumo comunitario. Investigaciones recientes han demostrado el potencial de la WBE para la alerta de señales de drogas, como la identificación de NSP y el aumento del consumo de crack en algunas ciudades de la UE.