Condiciones de salud mental durante la pandemia por COVID-19
Fuente:
Resumen
Introducción: las condiciones por la pandemia del COVID-19 promueven riesgos a la salud mental.
Objetivo: se evaluó el nivel de riesgo a desarrollar condiciones de salud mental en función de las situaciones relacionadas con el COVID-19: el confinamiento, síntomas o sospecha de COVID-19, el fallecimiento de personas cercanas, el uso de alcohol y la violencia en el hogar.
Método: participaron 8,348 personas de origen mexicano, con un promedio de 25 años (DE =11.24), 50% solteros (4,133), 69% mujeres (5,720), 47% en cuarentena (3,948), 50% parcialmente en cuarentena (4,193) y 3% que no estaba en cuarentena (207). El estudio fue correlacional predictivo ex post facto utilizando la WebApp del Cuestionario para la detección de riesgos a la Salud Mental COVID-19 (Alfa de Cronbach: 0.96; varianza explicada del 64%) programado con Linux®, PHP®, HTML®, CSS®, y JavaScript®. Las variables latentes se derivaron de 124 iteraciones con 103 parámetros (t[496] = 201,464, p=.000), un CFI = 0.921, un TLI = 0.908, un RMSEA = 0.067 (0.066 – 0.068) y un SRMR = 0.051.
Resultados: la evitación predijo el estrés agudo, éste predijo la ansiedad de salud; la ansiedad por salud predijo la ansiedad generalizada/tristeza y la somatización; y estas últimas, el distanciamiento/enojo en las personas.
Discusión y conclusiones: el confinamiento, la sospecha o tener síntomas, el consumo explosivo de alcohol y reportar violencia emocional o física, se asociaron con los riesgos a la salud mental. Estudios posteriores evaluarán el impacto de estrategias de atención a distancia sobre los riesgos de estrés agudo y postraumático.
Palabras clave: salud mental, impacto COVID-19, ansiedad, somatización, violencia.
Para conocer más publicaciones, presentaciones, videos y materiales de la Dra. Silvia Morales Chainé, favor de visitar su perfil como investigadora: https://www.issup.net/node/13799
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Buenas tardes, escribo desde Perú. En este contexto covid-19, se han evidenciado los problemas sociales así como los problemas de salud mental; el confinamiento genero un incremento de violencia hacia la mujer y el grupo familiar a causa de problemas como el consumo de alcohol y otras sustancias. actualmente en el área donde laboro se va atendiendo a estas victimas que desarrollaron dx. como depresión, ansiedad y trastornos mixtos. sin embargo aun no se logra cubrir la totalidad de las atenciones para ellos considero ser necesario mayor implementación de centros de salud mental y la intervención de los equipos multidisciplinarios.
Buenas tardes Kattty R., me encuentro totalmente de acuerdo con su comentario respecto a la implementación de centros de salud mental e intervención de equipos multidisciplinarios. Lamentablemente, la brecha que separa a la poplación de un buen servicio relacionado a la atención digna y de calidad en salud mental aun es muy grande, resulta realmente necesrio invertir en la prevención, detección e intervención en la salud mental, aun más cuando se presentan eventos estresores como la pandemia que ponen en riesgo inminente la estabilidad física y psicológica de los ciudadamos desencadenando malestar psicoemocional que requiere de una pronta atención. La creación de instituciones que se ocupen de ello como también de el trabajo interdisciplinarío con una pieza clave para subsanar situaciones que afecten a la salud mental de las personas.
In reply to Buenas tardes, escribo desde… by KATTY ROCIO OR…
Buenos días.
La verdad que la pandemia deja efectos que se están visualizando y trabajando pero aún queda mucho por hacer.
En Uruguay un equipo de investigadores de la Facultad de Psicología de la Universidad de la República llevó a cabo una investigación acerca del impacto de la pandemia ocasionada por el Covid 19 en salud mental en 2020. Con el objetivo de estudiar el efecto de variables como el aislamiento social y el desempleo tomaron una muestra de 1059 personas, las cuales fueron convocadas a través de las redes sociales. Este estudio se realizó entre los meses de junio y octubre de 2020. Se aplicaron una serie de cuestionarios.Las conclusiones a las cuales llegaron es que teníamos ya un estresor muy grande que estaba afectando prácticamente a la totalidad de la población desde hace mucho tiempo,pero la pandemia ocasionó efectos que hicieron que las vulnerabilidades de cada individuo saliera a relucir.
Una de las cosas que los sorprendió fue que no todos los tipos de síntomas aumentaron, sino que hubo un aumento específico de dos tipos de síntomas que son, el de la depresión y de ansiedad. Aquí se pudo ver que más allá de que ambos trastornos tienen características distintas, hay algo en común que es la afectación de la vida social.
Como podemos ver el efecto es similar a nivel mundial más allá de las políticas de Estado, por dicha razón pienso que como trabajadores de la Salud debemos aportar a generar hábitos y prácticas para fortalecer nuestro bienestar.
Buenos días.
La verdad que la pandemia deja efectos que se están visualizando y trabajando pero aún queda mucho por hacer.
En Uruguay un equipo de investigadores de la Facultad de Psicología de la Universidad de la República llevó a cabo una investigación acerca del impacto de la pandemia ocasionada por el Covid 19 en salud mental en 2020. Con el objetivo de estudiar el efecto de variables como el aislamiento social y el desempleo tomaron una muestra de 1059 personas, las cuales fueron convocadas a través de las redes sociales. Este estudio se realizó entre los meses de junio y octubre de 2020. Se aplicaron una serie de cuestionarios.Las conclusiones a las cuales llegaron es que teníamos ya un estresor muy grande que estaba afectando prácticamente a la totalidad de la población desde hace mucho tiempo,pero la pandemia ocasionó efectos que hicieron que las vulnerabilidades de cada individuo saliera a relucir.
Una de las cosas que los sorprendió fue que no todos los tipos de síntomas aumentaron, sino que hubo un aumento específico de dos tipos de síntomas que son, el de la depresión y de ansiedad. Aquí se pudo ver que más allá de que ambos trastornos tienen características distintas, hay algo en común que es la afectación de la vida social.
Como podemos ver el efecto es similar a nivel mundial más allá de las políticas de Estado, por dicha razón pienso que como trabajadores de la Salud debemos aportar a generar hábitos y prácticas para fortalecer nuestro bienestar.
Condiciones de salud mental durante la pandemia por COVID-19
En la provincia de Abancay en cuanto al Covid-19, el confinamiento y distanciamiento social han generado efectos en la salud mental tales como el miedo, desesperanza, ansiedad, irritabilidad manifestada en el miedo a contagiarse, miedo a que alguien se le acerque y acudir a un Establecimiento de Salud por temor a contagiarse, lo que generó la discontinuidad del tratamiento de los diferentes problemas de salud mental que aqueja la población apurimeña.
Hola a todos.
Comparto los planteos realizados por los compañeros, en tèrminos generales creo que la pandemia ha afectado sin lugar a dudas las condiciones de la salud mental en diferentes aspectos, tanto a nivel individual, familiar, social, laboral, sanitario; etc.
La investigación en esta àrea es muy importante para identificar y así poder abordar las dificultades generadas por la pandemia a nivel de salud mental y minimizar los efectos nocivos a la largo plazo.
Considero importante hacer mención de estos sucesos, ya que nuestra generación no ha vivenciado una situación como la que hemos vivido en el 2020 por la pandemia del COVID 19. Mencionada experiencia generó un impacto económico que suscitó como detonante a crisis emocionales de aquellas personas con situaciones extremas, despertando síntomas como la tristeza, ansiedad, la desesperación, el inicio en sustancias psicoactivas para calmar nervios o estrés, también generando el silencio de la violencia física, verbal y sexual. En la realidad en la que me encuentro, he notado que, si bien es cierto, los pobladores se sintieron limitados con las medidas impuestas por el gobierno de nuestro país, ocasionando molestias, coleras y rebeldía que se vio reflejado en el hogar. Personas enfurecidas y con baja tolerancia a la frustración, sin ganas de “aguantar” cosas, sobre todo en casa con los hijos y la esposa (o), desquitándose sin medir consecuencias con el único objetivo de solucionar sus problemas. Además, las nuevas modalidades de estudio, que muchos adultos desconocían o no dominaban, ocasionando estrés en los padres, así también frustración de no poder ayudar a sus menores, o niños estresados al no poder tener acceso a las plataformas, teniendo como consecuencia la deserción escolar, o el fracaso de los mismos.
Los efectos sobre la salud mental observados y anticipados en esta pandemia son variados, de creciente magnitud, se dan en múltiples niveles y afectan distintas dimensiones. En esta pandemia se ha visto que las estadisticas en caso de problemas de salud mental han aumentado de manera alarmente, los casos de salud mental que mas se han visto son de depresion, ansiedad, violencia y consumo de sustancias. La pandemia y los días de cuarentena provocan estrés y dificultades emocionales, las mismas que son más peligrosas en personas con problemas relacionados al consumo de sustancias psicoactivas Las personas con problemas relacionados con el consumo de sustancias pueden tener más probabilidad de experimentar malestar emocional durante esta cuarentena. Por ello, es importante que las personas vulnerables que dejan de consumir alcohol u otras sustancias mantengan su motivación y busquen nuevas estrategias para mantener rutinas saludables y prevenir recaídas, ya que las medidas de confinamiento pueden provocar estrés y dificultades emocionales.
Como dices, es importante destacar el consumo de sustancias, porque también fue en aumento en esta pandemia. Además debemos tener en cuenta las comorbilidades en cuanto al consumo de sustancias y otros trastornos mentales. Tener una visión integral del fenómeno nos permitirá manejar de mejor manera las situaciones, ya que hay muchos factores de la pandemia y de otros tipos que influyen en las personas, provocando distintos tipos de malestares y dificultades emocionales. Nuestro trabajo como profesionales de la salud es incidir en los distintos niveles de atención, especialmente la primaria, para poder tener un mayor alcance.
In reply to Los efectos sobre la salud… by Marco Antonio …
Buenas tardes, agradecer por el material informativo para todo personal de salud donde se dispone que es de mucha ayuda para reconocer las condiciones de riesgo frente a la realidad actual la pandemia del Covid -19 bien sabemos que afectado o aumentado a un mas los riesgos de salud mental. a esto se asume los distintos factores de riesgos por condiciones determinantes, así como el abuso de consumo de alcohol o otros factores de riesgo; sumido a esto la violencia familiar o abuso familiar, por tal el material informativo expone una gran diverso exponente de alternativas también de actividades de apoyo y vínculamiento frente a la situación que a a afectado a amuchas familias. el tema de tener una salud mental afectada de por si ya se tienen consigo un aumento mas la pandemia que una afecta a muchos.
Buenas noches, es interesante a los resultados que llegaron con la investigacion realizada, de como en este tiempo de pandemia de la COVID- 19, ha tenido un impacto en toda la poblacion no solo a nivel economico; sino tambien, a nivel de la salud fisica y mental; es asi que se va observando el incremento de consumo excesivo de alcohol en todo este tiempo de confinamiento.
En la region Apurimac, antes del inicio de la pandemia ya se presenciaba el consumno desmerudado de alcohol, pero ahora con la pandemia se ha ido acentuando; al mismo tiempo se ha incrementado el indice de violencia intrafamiliar. Es por ello, importante reforzar las estrategias de prevencion en el primer nivel de atencion.
Definitivamente el tema de la pandemia por la covid-19 fue un cambio radical en la visa de muchas personas ya que durante el confinamiento de las personas atrajo mayores problemas ya sea nivel mental o fisico y que condiciono a cierto vicios como el alcoholismo, adicciones a los juegos, cuadros depresivos y ansiosos, rupturas familiares, violencia, etc. la demanda de pacientes por estos cuadros fueron altisimos y mas aun en las personas que contrajeron la infeccion por covid, los centros de salud mental fueron de suma importancia para la deteccion y tratamiento de estos, es bueno resaltar lo positivo de lo que venimos viviendo ya que se llega a tomar mayor importancia a la salud mental e intentar romper la estigmatizacion ya que por ello la brecha viene hacer muy alta.
Buenos días, me encuentro de acuerdo con Mayumy, definitivamente el cambio que ocurrió en la pandemia trajo muchos problemas de salud mental como la ludopatía que se vio incrementado y visibilizo la importancia de la salud mental rompiendo un poco las barreras y estigmatización que existe en acudir a un psiquiatra o psicólogo
In reply to Definitivamente el tema… by Mayumy Rojas
A más de un año y medio que inició la pandemia, podemos seguir viendo sus efectos en la salud mental de las personas. Hubo un incremento en los niveles de ansiedad y depresión, esto por condiciones como el confinamiento, miedo a enfermarse y que sus seres queridos se enfermaran, muertes de personas cercanas, pérdidas de empleo, entre otras muchas más. Por lo que se convirtió en necesidad el evaluar los riesgos y consecuencias que este evento estresante estaba causando en las personas. El artículo de Chainé et at., nos muestra cómo evaluaron justo el nivel de riesgo a desarrollar condiciones de salud mental en función del COVID-19. Efectivamente pudieron ver que la detección oportuna de estos riesgos puede prevenir condiciones de morbilidad.
Muchas instituciones se pusieron en marcha proponiendo programas para atender estas problemáticas, como el aumento del consumo de sustancias, pero esto claramente es un reto que se está abordando en estas instituciones, muchas adaptándose a la cuestión tecnológica para poder justamente llegar a las personas debido al distanciamiento social y riesgo del contagio. Sin embargo, se puede notar una brecha en atención que varía dependiendo el país en que se encuentren, no nada más en cuanto a la atención de la salud mental sino que a los recursos que tienen para luchar contra el COVID-19, lo que puede causar que los efectos en la salud mental de las personas empeoren.
Buenos Días, quisiera comentar con respecto al tema planteado, que durante la pandemia y después se evidencio un incremento del consumo de sustancias probablemente por el aburrimiento y la frustración de no estar conectado a la rutina habitual de su vida, asociado a síntomas depresivos como: desesperanza, irritabilidad, cambios en el apetito y alteraciones del sueño. Adicionalmente se vieron efectos psicológicos negativos, síntomas de estrés postraumático, confusión y enojo. Las enfermedades de salud mental se vieron agravadas por la incertidumbre asociada con el COVID-19, más el efecto del distanciamiento social, el aislamiento y la cuarentena, con ansiedad por el estado de salud generando alteraciones somáticas y ansiedad generalizada con alteraciones psíquicas importantes
Buenos días, gracias por compartir tu perspectiva sobre el tema. Es cierto que el incremento en el consumo de sustancias durante la pandemia ha sido un problema preocupante, posiblemente exacerbado por la interrupción de las rutinas habituales y el aumento de los síntomas depresivos y de ansiedad que muchas personas han experimentado. Lo importante es reconocer esos problemas, para tener un mejor abordaje en relación a la salud mental.
In reply to Buenos Días, quisiera… by MARIELENA MURGUEYTIO
Si bien es cierto, y de acuerdo a diversas investigaciones, los eventos traumáticos, crisis o situación que genere altos niveles de estrés podrá poner en riesgo la condición de salud mental del individuo y de la comunidad en sí. Bajo el contexto del COVID-19, se identificaron diversas reacciones emocionales, cognitivas y conductuales negativas, lo que implica la importancia de estudio de la afectación que desencadena esta o cualquier crisis sanitaria en el ser humano. En este sentido, las crisis psicológicas, conductas impulsivas y de riesgo son efectos que deben ser evaluados para para prevenir crisis de ansiedad y problemas emocionales, como también reducir los elevados niveles estrés generados. En el panorama ecuatoriano, sin divergir de otras realidades latinoamericanas durante la pandemia, experimentó asimismo una fuerte afectación a la salud mental de sus ciudadanos, identificándose también sintomatología de estrés agudo, ansiedad, depresión, el incremento de violencia como también de consumo de sustancias en parte de su población, observándose efectos tanto a corto, mediano y largo plazo.
En este sentido, y bajo la experiencia vivida con la pandemia COVID-19, nos queda de aprendizaje la importancia de realizar planes de prevención e intervención en cualquier situación de emergencia que pueda poner en riesgo la salud mental de las personas. Para ello, resulta importante el estudio de varios factores asociados al desarrollo de algún tipo de malestar psicosocial que pueda desencadenarse ante eventos estresores de gran potencia, como también trabajar en los factores protectores como las redes de apoyo, la cohesión y apoyo familiar y social. En este punto, resulta importante el papel de los medios de atención sanitaria pero también el apoyo y respaldo de accionares políticos y económicos que se destinen a la importancia de la prevención, detección e intervención de los problemas en salud mental que pueden desencadenarse ante eventos o crisis emergentes.
El ser humano, al ser un ser social, el aislamiento por la pandemia, parcial o total, significó un cambio muy grande en sus condiciones de vida, incluyendo la confrontación de sí mismo con su realidad hasta ese momento. La interacción con su familia fué un factor muy importante que desató conflictos o fortaleció los lazos.
En el primer caso, por supuesto que fue el detonante de muchas afecciones de salud mental, incluyendo el consumo de drogas. Lo interesante es el cómo estas se relacionaron con las otras afecciones de salud mental como indica el artículo.
Es cierto que el aislamiento impuesto por la pandemia representó un cambio significativo en la vida de muchas personas, lo que llevó a una confrontación directa con su propia realidad y a una reevaluación de las relaciones familiares y personales.
Por otro lado, para muchas familias, el tiempo compartido durante el aislamiento ha representado una oportunidad para fortalecer los lazos afectivos, profundizar la comunicación y el apoyo mutuo. El apoyo familiar puede jugar un papel crucial en la promoción de la salud mental durante tiempos difíciles.
En resumen, el impacto del aislamiento durante la pandemia en las relaciones familiares y en la salud mental es complejo y multifacético, y puede variar ampliamente de una persona a otra.
In reply to El ser humano, al ser un ser… by Guillermo Yánez
Muy interesante revisar como interactuan las distintas variables en cada grupo humano, y cómo estas cuando se van modificando van provocando otras modificaciones en el comportamiento de las personas. Me quedo muy sorprendido con este estudio, cuan importante son las buenas relaciones interpersonales en el desarrollo humano.
Buenas Noche!!!
En relación a las consecuencias e impacto que ha producido el Covid.19 a nivel mundial y en cada uno de nuestros países, en relación a la psicología de cada persona, en la salud mental la relación a las parte individua, familiar, social y profesional, los procesos y situaciones emocionales que propenden a desarrollar o aparezcan trastornos mentales. A las situaciones de afrontamiento de las situaciones que por la pandemia se han atravesado.
La importancia de la prevención con la implementación de estrategias desde la instituciones gubernamentales como privadas para reducir los eventos que afectaron e impactaron la psiquis y afectaron a las personas en muchos factores, encontrar y establecer seguimientos a corto media y largo plazo, agradezco por esta oportunidad de poder participar.
Buenas Noche!!!
En relación a las consecuencias e impacto que ha producido el Covid.19 a nivel mundial y en cada uno de nuestros países, en relación a la psicología de cada persona, en la salud mental la relación a las parte individua, familiar, social y profesional, los procesos y situaciones emocionales que propenden a desarrollar o aparezcan trastornos mentales. A las situaciones de afrontamiento de las situaciones que por la pandemia se han atravesado.
La importancia de la prevención con la implementación de estrategias desde la instituciones gubernamentales como privadas para reducir los eventos que afectaron e impactaron la psiquis y afectaron a las personas en muchos factores, encontrar y establecer seguimientos a corto media y largo plazo, agradezco por esta oportunidad de poder participar.
La pandemia fue uno de los acontecimientos que trajo consigo consecuencias en la salud mental de las personas debido al cambio drástico que se dio en la rutina cotidiana de los individuos pasando de un estado de actividad a un estado completo de quietud y cambio de hábitos, al ser la pandemia una problemática global ocasionó consecuencias en la salud mental según el articulo Prevención en la salud mental, durante la pandemia del coronavirus la gran mayoría de la población refirieron haber sentido estrés intenso producido a que las personas se encontraban aisladas de los factores de la vida cotidiana, así como la falta de interacción con otros miembros del entorno, otras de las consecuencias que se vivió durante la pandemia fue el incremento del trastorno depresivo, ansioso, el aumento en el consumo de sustancias legales así como ilegales, consumo de alcohol. Dentro del artículo se habla también las consecuencias neurológicas que se identificaron con el COVID 19 mediante estudios del cerebro que demostraron la presencia de edema cerebral y degeneración neuronal, lo que demuestra que la salud mental presento complicaciones a corto y largo plazo.
Los efectos post covid-19 han sido de gran impacto en la salud de la población a pesar de haber salido de la pandemia ha dejado grandes secuelas a nivel económico, social y sobre todo efectos importantes en la salud mental mismos que vienen de factores como perdidas de uno o varios miembros de las familias, secuelas post covid-19 con afectación físicas, violencia intrafamiliar que empezó en pandemia, abuso de consumo de alcohol, desempleo, estancamiento económico son los factores más comunes que llevan a la población a desencadenar afectación en la salud mental ansiedad y depresión e incluso intento suicida, siendo hoy un tema de salud donde las autoridades le están dando el debido seguimiento implementando nuevas estragáis en salud mental.
Muy interesante articulo para poder reflexionar ahora, varios años después el impacto de la pandemia en la comunidad, actualmente me encuentro seguido con participantes que identifican el origen de su malestar en la pandemia, especialmente en el caso de adolescentes y niños, quienes venían presentando conflictos como bajo rendimiento escolar o consumo ocasional de alcohol, a partir de la pandemia pasaron a desarrollar consumos problemáticos y a ausentarse completamente hasta por dos años de las aulas. los años que le siguieron a la pandemia para muchos de estos chicos, incluso algunos ya adultos jóvenes ha sido el encontrar los recursos para reponerse a los dos primeros años de pandemia, que ahora vemos que es aun difícil estimar la totalidad del impacto que tuvo en las personas especialmente las que ya presentaban algún tipo de vulnerabilidad o condición preexistente al inicio del COVID-19.
Buenos días con todos, en mi opinión y como se pudo visibilizar el COVID-19 llegó al mundo generando una crisis a nivel general y global, elevados niveles de estrés, y como una adversidad es un factor de riesgo bien establecido para los problemas mentales a corto y largo plazo.
La angustia que sufrían las personas era comprensible durante la emergencia por la COVID-19, las personas tienen miedo a infectarse, morir y perder a familiares Las mujeres y las niñas también han sufrido un aumento de la violencia y los maltratos en el hogar. La desinformación generalizada sobre el virus y las medidas de prevención y la profunda incertidumbre sobre el futuro son importantes fuentes de angustia adicional. Las imágenes impactantes sobre la enfermedad en los medios de comunicación han contribuido a generar miedo. El hecho de saber que las personas pueden no tener la oportunidad de tener una despedida adecuada de sus seres queridos fallecidos por el COVID-19 generó depresión y procesos de duelos complicados o patológicos.
En diversos países se registraron niveles más elevados de lo normal de síntomas de depresión y ansiedad.
Para hacer frente a los factores estresantes, muchas personas recurrieron a mecanismos como el consumo de alcohol, drogas o tabaco, o dedicar más tiempo a comportamientos potencialmente adictivos, como las apuestas en línea. Según estadísticas de Canadá, durante la pandemia hubo un aumento de un 20 % el consumo de alcohol en la población del país de entre 15 y 49 años. No se deben pasar por alto los efectos a largo plazo de la crisis en la salud mental de las personas y, a su vez, el impacto de la salud mental en la sociedad. La mortalidad relacionada con el suicidio y el consumo de sustancias constituyó la mayoría de esas muertes, que estaban relacionadas con la pérdida de esperanza debido a la falta de empleo y el aumento de la desigualdad.
Antes de la pandemia, en la mayoría de las comunidades del mundo, y en particular en muchos entornos humanitarios y situaciones de conflicto, existía ya un acceso limitado a servicios de salud mental de calidad y asequibles. Ese acceso ha disminuido aún más debido a la COVID-19, puesto que la pandemia ha interrumpido los servicios en todo el mundo.
Los pacientes ambulatorios de servicios de salud mental de todo el mundo también se han visto gravemente afectados. La demanda de servicios de salud mental en persona se ha reducido de forma importante por el miedo al contagio, y en particular en el caso de las personas mayores. Muchos servicios de salud mental han pasado a la atención telemática o virtual. Se hace cada vez más hincapié en la autoayuda y los programas de crianza de los hijos y los servicios de salud mental digitales (que incluyen el uso de tecnologías más básicas como el teléfono y los mensajes de texto). Si bien es cierto la salud mental se vió vulnerada y afectada en la pandemia del COVID19, esto permitió de alguna manera que las personas puedan visibilizar de manera general la necesidad de atender su salud mental, y que las políticas puedan dar mayor importancia a la salud mental en varios países.
Bibliografía:
Informe de políticas: La COVID-19 y la necesidad de actuar en relación con la salud mental (2020). Recuperado de: https://www.un.org/sites/un2.un.org/files/policy_brief_-_covid_and_mental_health_spanish.pdf
La pandemia de COVID-19, permitió observar un aumento significativo en casos de salud mental manifestándose de diversas formas y afectar a personas de todas las edades y trasfondos. Algunos de los factores que han contribuido a estas condiciones incluyen: aislamiento social, estrés, ansiedad, estados de duelo, acceso a información inadecuada y menos acceso a programas de salud mental.
A medida que la pandemia se propagaba por todo el mundo, muchas personas experimentaron un aumento en el estrés, la ansiedad y el miedo debido a la incertidumbre sobre la enfermedad y sus consecuencias; habiendo un aumento significativo en el acceso de salud mental.
A pesar de los esfuerzos por controlar la propagación del virus, la pandemia continuó teniendo un impacto significativo en la salud mental de las personas, llevando a una disminución en el cumplimiento de las medidas de seguridad y un aumento en la frustración y el agotamiento emocional, en conjunto con desafíos económicos y laborales persistentes
A medida que la pandemia continuó evolucionando, muchas personas pudieron desarrollar estrategias de afrontamiento y adaptarse a las nuevas realidades. Sin embargo, muchos desafíos en términos de salud mental, como el estrés, la ansiedad y la depresión, continuaron siendo relevantes debido a la prolongada naturaleza de la pandemia y sus efectos acumulativos.
En resumen, aunque es difícil predecir con certeza cómo serán las condiciones de salud mental en 2024, es probable que la pandemia continúe teniendo un impacto significativo en la salud mental de las personas, aunque con matices y cambios basados en la evolución de la situación y las respuestas colectivas.
Este comentario captura de manera precisa los efectos multifacéticos que la pandemia de COVID-19 ha tenido en la salud mental de las personas. Es notable cómo factores como el aislamiento social, el estrés y la incertidumbre han contribuido a un aumento en los problemas de salud mental en todas las edades y grupos demográficos.
Es alentador ver que, a medida que la pandemia ha progresado, muchas personas han desarrollado estrategias de afrontamiento y han buscado apoyo para enfrentar estos desafíos. Sin embargo, es importante reconocer que los efectos a largo plazo de la pandemia en la salud mental aún están por determinarse completamente, y es probable que persistan durante algún tiempo, especialmente dada la naturaleza prolongada de la situación y sus repercusiones socioeconómicas.
Este comentario subraya la necesidad continua de atención y apoyo en materia de salud mental, así como la importancia de implementar medidas tanto a nivel individual como colectivo para abordar estos desafíos de manera efectiva. La adaptación y la resiliencia son clave en este proceso, pero también lo son el acceso a recursos y la comprensión empática de las dificultades que muchas personas enfrentan.
In reply to La pandemia de COVID-19,… by Jamal Toala
En el contexto del COVID-19, la ansiedad asociada al uso de drogas es un tema preocupante que merece atención tanto a nivel individual como comunitario. La pandemia ha generado una serie de desafíos y tensiones que pueden aumentar el riesgo de desarrollar ansiedad y otras condiciones de salud mental, lo que a su vez puede llevar a un aumento en el consumo de drogas como mecanismo de afrontamiento.
Es importante reconocer que la ansiedad y el estrés provocados por la pandemia pueden impulsar a algunas personas a recurrir al uso de sustancias como una forma de escape o alivio temporal. Sin embargo, es fundamental entender que el uso de drogas como medio para lidiar con la ansiedad puede tener consecuencias negativas para la salud física y mental a largo plazo.
Como comunidad, debemos trabajar para ofrecer apoyo y recursos a aquellos que enfrentan ansiedad y estrés durante esta crisis. Esto incluye brindar acceso a servicios de salud mental, promover estrategias de afrontamiento saludables y fomentar una cultura de apoyo mutuo y comprensión. Además, es crucial desestigmatizar la búsqueda de ayuda profesional para problemas de salud mental y adicciones, y crear un entorno en el que las personas se sientan seguras para buscar el apoyo que necesitan.
En última instancia, abordar la ansiedad asociada al uso de drogas en el contexto del COVID-19 requiere un enfoque holístico que reconozca y aborde los factores subyacentes que contribuyen a este fenómeno. Es necesario trabajar juntos como comunidad para enfrentar estos desafíos y ofrecer un apoyo significativo a aquellos que lo necesitan.
Durante la pandemia del COVID-19, se ha vuelto aún más evidente la importancia de abordar el consumo de tabaco. Aunque inicialmente se pensó que fumar podría proteger contra el virus, ahora sabemos que los fumadores tienen un mayor riesgo de sufrir complicaciones graves de COVID-19. Además, el tabaquismo compromete la salud pulmonar y cardiovascular, lo que aumenta la vulnerabilidad frente a enfermedades respiratorias como el coronavirus. Es crucial intensificar los esfuerzos para reducir el consumo de tabaco, ofreciendo recursos de apoyo para aquellos que deseen dejar de fumar y promoviendo políticas de control del tabaco más estrictas. La pandemia nos brinda una oportunidad para reevaluar nuestra relación con el tabaco y trabajar hacia comunidades más saludables y resilientes.
La pandemia por Covid-19 fue de gran impacto para todos, mientras se dictaba el confinamiento obligatorio todos teníamos que reorganizar nuestros tiempos, espacios e interacciones, el temor nos acosaba y la incertidumbre era la mejor arma dentro de la negación de aquella realidad. Poco a poco podíamos ir adaptándonos a los cambios, los espacios físicos de las casas se readecuaron constituyéndose en espacio de trabajo y áreas académicas de tiempo indefinido, las madres y los padres se volvieron empleados y maestros, las dinámicas familiares se volvieron desconocidas, los reencuentros. entre los miembros de la familia era obligatorio y en ocasiones desconocido, acontecimientos jamás antes vividos desatan actitudes imprevistas como consumo de alcohol para amortiguar la impotencia, la frustración y pérdida hasta el dolor de la distancia y la de seres queridos a los que el virus les arrebató la vida, la angustia, la ansieda y la depresión se constituyeron en reacciones defensivas ante cruento dolor. Etapas no vividas producen confusión, temor e insatisfacción, y con ello la búsqueda de alternativas no saludables que se constituirían en la armadura para enfrentar la dura realidad. Actualmente existen adolescentes que aún parecen niños protestan ante este impacto del que no son responsables pero sí posibles víctimas. Entonces es importante preguntarnos cuánto impacto tuvo en cada uno de nosotros? Cómo impactó nuestras familias? Cómo modificó nuestra vida? Y qué es lo queremos hacer a partir de alllí?
Definitivamente hubo grupos de personas más vulnerables en torno a su salud mental. Muchas personas tuvieron problemas para adaptarse a los cambios a nivel politico, social, educativos, entre otros. En pocas palabras, aquellas personas que no pudieron seguir el ritmo de todo ello o que su estilo de vida se vio completamente alterado, tuvieron repercusiones importantes en su salud metal. Esto sin contar estrategias poco saludables como el consumo de drogas o que se hayan instaurados hábitos de por si poco favorables.
Si bien es cierto que muchas conductas, emociones y pasamientos que acompañaron la pandemia eran congruentes al contexto que se vivió, pero no significa que no haya dejado secuelas o inclusive vulnerabilidades expuestas, ahora con mayor injerencia en el bienestar de cada persona.
In reply to La pandemia por Covid-19 fue… by Irma Jimena G…
El panorama que se vivió durante la pandemia por COVID-19 sin duda sirvió como un detonante para que incrementaran casos de personas con sintomatología ansiosa y/o depresiva. Factores como la incertidumbre, medidas de asilamiento e inclusive una dinámica disfuncional preexistente en el núcleo familiar pudieron servir como catalizadores en muchos casos de personas afectadas.
En un escenario donde muchas personas tuvieron cambios drásticos en su estilo de vida en tan corto tiempo, no es descabellado sugerir que muchos tuvieron problemas en adaptarse. Como algo nuevo y que avanzo muy rápido, el desconocimiento y desinformación abundaron. La estrategia de evitación se evidenció, algunos preferían no confiar o simplemente no asumir la realidad que estaba ocurriendo.
La preocupación constante y la evidencia de personas que tuvieron complicaciones muy graves de salud dejó a muchas personas sensibles al tema. El miedo constante de contraer el virus o que alguna persona cerca se viese afectada por ello produjo que muchas tuviesen un incremento de pensamientos catastróficos y conductas compensatorias. Muchos optaron por no salir, aislarse o no tener ningún contacto físico con personas cercanas, hasta mayor frecuencia de rituales de lavado de mano o desinfección.
Otro factor interesante de análisis es como se vio afectada la convivencia de muchas familias, aún más en hogares donde la dinámica familiar se percibía como disfuncional. Para algunos la familia quizá no pudo representar un factor de protección y, al contrario, esto jugo un papel para aumentar el displacer de la convivencia con los problemas subyacentes.
Muchas personas se encontraron vulnerables durante la pandemia por COVID-19. La necesidad del cuidado psicológico en las personas que la atravesaron se vio en evidencia. Las secuelas de esta experiencia no deben ser ignoradas.
Buenas tardes, un gusto saludarles. Soy estudiante de intercambio de Perú estudiando en la UNAM y pude leer su artículo relacionado a las condiciones de salud mental durante la pandemia.
Debo decir que la pandemia ha tenido un impacto significativo en la salud mental de las personas en todo el mundo y ello lo puedo ver en el artículo pues tanto la población mexicana como peruana tuvo consecuencias similares a raíz de la pandemia. La incertidumbre, el aislamiento social, la pérdida de seres queridos, el estrés económico y la ansiedad relacionada con la salud han contribuido a un aumento en los problemas de salud mental, incluyendo la depresión, la ansiedad, el estrés postraumático y los trastornos del sueño. Dificultades lamentables, de las cuales quizá no muchas las personas tienen herramientas para tratarlo.
Gracias al artículo pude notar que pese a ser países difierentes, comparten las mismas consecuencias pos pandemia, lo cual me hizo pensar en que los estados de los países estuvieron en situaciones similares de afrontamiento hacia una crisis como aquella. Sería importante que al notar las consecuencias de la pandemia puedan mejorar en sus estrategias ante crisis como la pandemia, estrategias que puedan beneficiar a la población.
Considero importante notar las consecuencias que más resaltan en la población mexicana. Gracias al artículo se puede identificar ello, lo cual puede ayudar a la comunidad de psicólogos a que puedan instruirse mucho más en estas áreas, como la violencia física y consumo de alcohol, de esta forma puedan atender a la población lo más pronto posible.
El artículo brinda información relevante para los psicólogos y el Estado, quien podría proporcionar campañas de salud gratuitas pos-pandemia. Asimismo, considero que la población en general tiene que conocer que la pandemia ha dejado estragos en la salud mental y a su vez, puedan identificar esa sintomatología dentro de ellos mismos o en personas cercanas, para que puedan recurrir a buscar apoyo terapéutico. Me parece importante este artículo para toda la comunidad.
Estimada Fiorella
Comparto totalmente tu comentario, considero importante tomar acción sobre la investigación realizada para intervenir desde la prevención y también lograr abordar las consecuencias generadas a partir de la pandemia del COVID-19.
Saludos,
Paola
In reply to Considero importante notar… by Fiorella Ashle…
Aunque han pasado varios años desde el comienzo de la pandemia, los efectos en la salud mental de las personas pueden perdurar y seguir siendo una preocupación importante. Es crucial reflexionar sobre cómo estas condiciones pueden haber evolucionado con el tiempo y qué medidas podemos tomar en la actualidad para apoyar a quienes aún están sintiendo los impactos emocionales.
Es importante recordar que muchas personas todavía están lidiando con los efectos a largo plazo en su bienestar psicológico. Este estudio nos recuerda que el apoyo continuo y los recursos de salud mental siguen siendo esenciales para ayudar a las personas a recuperarse y adaptarse a los desafíos persistentes.
La pandemia mundial de COVID-19 ha sumido al mundo en una crisis sin precedentes. En muchos países la enfermedad ha llevado al límite la capacidad de los proveedores de servicios de salud, y las restricciones impuestas por los Gobiernos han perturbado considerablemente la economía mundial. En lo que respecta a los mercados de drogas, se desconoce cuál ha sido el impacto de la pandemia y es difícil predecirlo, pero podría ser de gran alcance. Las restricciones a la circulación limitan el acceso a los precursores y las sustancias químicas esenciales, por lo que algunos productores podrían verse obligados a buscar nuevas formas de fabricar drogas. Es posible que los traficantes tengan que encontrar nuevas rutas y métodos, ya que las restricciones a los viajes les impiden cruzar fronteras. Los hábitos de consumo y la disponibilidad de las drogas podrían cambiar, y la capacidad de respuesta de los Gobiernos podría verse mermada.
En este documento se observa las condiciones de salud mental durante la pandemia de COVID-19 en México. Se destaca que durante la cuarentena, aumento el riesgo de contagio generado impactos psicológicos significativos en todas las personas sin distinsion de edad, con altos niveles de estrés, ansiedad y emociones negativas. Estudios recientes han demostrado que las personas en cuarentena experimentan mayor pérdida de interés, deseos de autolesionarse, dificultades para consiliar el sueño y prestar atención, en comparación con aquellas personas que no están en confinamiento. Además, es importante enfatizar que se observó que las mujeres en cuarentena presentan niveles más altos de estrés agudo que los hombres.
Otro aspecto relevante del documento es la relación entre el nivel de estrés agudo, la ansiedad generalizada y la evitación con factores como el uso excesivo de alcohol y la violencia doméstica. Durante la segunda fase de la pandemia, aumento el estrés agudo, la tristeza, el distanciamiento, el enojo y la ansiedad generalizada, con la ansiedad relacionada con problemas de salud.
Este Este estudio resalta cómo la presencia del riesgo de contraer COVID-19 puede desencadenar un estrés agudo similar a eventos traumáticos, asociándose incluso con el desarrollo de trastorno por estrés postraumático.
Además, se analizó la influencia de variables sociodemográficas en la salud mental de la población mexicana durante la pandemia identificando las diferencias por estracto social, observandose diferencias significativas en los niveles de estrés, distanciamiento, ansiedad generalizada y ansiedad por la salud en función de la condición de cuarentena, ya que fue un tiempo en donde se evidencio muchas muertes a nivel mundial y las noticias abundaban sobre este tema en todos los medios de comunicación. Las mujeres mostraron niveles más altos de estrés, distanciamiento, ansiedad y evitación en comparación con los hombres. Estos hallazgos subrayan la importancia de considerar no solo los aspectos clínicos, sino también los contextos sociodemográficos al abordar la salud mental en tiempos de crisis sanitaria.
a población se ha enfrentado a múltiples desafíos durante la pandemia de COVID-19, incluida la dolorosa pérdida de seres queridos debido al virus, así como una crisis económica sin precedentes que ha resultado en la pérdida de empleos y medios de sustento para muchas personas. Además, todos hemos experimentado el cierre de escuelas, el aislamiento social, la transición al teletrabajo, el temor al contagio y una gran incertidumbre sobre el futuro. Estas condiciones han contribuido significativamente a la aparición de una serie de problemas de salud mental, como el aumento de la ansiedad, la depresión, los trastornos del sueño y el incremento en el consumo de alcohol, tabaco, drogas y otras sustancias, así como situaciones de violencia intrafamiliar.
Aunque la mayoría de los países de la Región han incluido la salud mental y el apoyo psicosocial como parte integral de sus planes nacionales de respuesta al COVID-19, solo dos de ellos han asignado financiamiento adecuado para estas áreas.
Es crucial fortalecer los mecanismos de coordinación en materia de salud mental y apoyo psicosocial, así como implementar la Primera Ayuda Psicológica (PAP) dirigida a las poblaciones más vulnerables. También es necesario desarrollar propuestas para iniciar y/o continuar con la intervención en salud mental y la atención psicosocial, incluyendo servicios de atención remota. Estas acciones son fundamentales para mitigar el impacto negativo en la salud mental de la población y garantizar un apoyo adecuado durante esta crisis sin precedentes.
Hola todos!
Escribo desde Ecuador. Creo que hablar de confinamiento al hablar del abuso de sustancias es fundamental. Muchas veces la soledad puede llevar a las personas a sentir la necesidad de consumir. También es importante recordar que existieron otros factores que pudieron incentivar el el consumo de sustancias durante la pandemia, tales como: los niveles de violencia intrafamiliar que subieron durante este periodo, el aumento en el estrés, ansiedad, problemas económicos, entre otros.
Debemos entender que si bien han pasado 4 años desde que pasamos por este evento de salud mundial histórico, su impacto sigue impactándonos en la actualidad. Es fundamental que los profesionales de la salud mental se encuentren preparados para afrontar futuros eventos como este.
¿Qué medidas de contingencia creen que se podría tomar?
Condiciones de salud mental durante la pandemia por COVID-19.
El principal objetivo de la investigación era evaluar el nivel de riesgo de desarrollar condiciones de salud mental en relación a la situación que se vivía en esa época, la pandemia por COVID-19, lo cual desencadenó un confinamiento permanente por al menos 5 meses donde en algunos hogares se presentó actos de violencia, los síntomas que se presentaban en caso de contraer la enfermedad y el fallecimiento de familiares, amistades cercanas.
Es interesante conocer a partir de los resultados de la investigación que la evitación fue la herramienta principal de la muestra, por esta razón se desencadenó ansiedad generalizada, tristeza y somatización. Lo cual, se puede evidenciar en casos del diario vivir y la sintomatología presentada cada vez mas seguido, considero que las consecuencias de la pandemia por COVID-19 aun se están evidenciando en la población por lo cual se debería entregar más recursos al área de salud mental y de esta manera atender de manera adecuada a la población, es decir brindar la oportunidad a las personas de tener el acercamiento al servicio de atención psicológica y además facilitar los procesos de atención.
Buenos días.
Este tema me parece muy importante de abordar, ya que la pandemia llegó para quedarse y no hablo solo del virus, es decir, trajo consigo muchas problemáticas que afectan tanto aspectos físicos (como el enfermar a las personas), emocionales (como el estrés, la ansiedad, depresión, temas de duelo, etc.), sociales (como el confinamiento) y, por supuesto, culturales (como problemas de discriminación, la prohibición de eventos, la suspensión de prácticas comunitarias, etc.).
Si bien, a unos años después de este suceso, considero que el personal de salud mental, debemos de estar mayormente capacitados para poder abordar de la mejor manera los estragos que quedaron. Tener las habilidades de una intervención que sea breve y eficaz, porque la vida va rápido, ya no nos permítimos el detenernos y en ese ir y venir del día a día nos olvidamos o ignoramos que la salud mental es igual de importante que la salud física. Y pienso, que el difundir e inculcar la importancia de atender esta cuestión puede ayudar en el bienestar de las nuevas generaciones.
Volviendo al tema principal que es COVID-19, el seguir investigando y, de alguna manera, el prepararnos va a ser de gran importancia por si en un futuro alguna otra pandemia llega a darse, saber de que manera afrontarla desde los dos fuertes principales: el medico y el psicológico.
Considero que la pandemia ha exacerbado los riesgos para la salud mental, y es crucial que las personas busquen apoyo, practiquen el autocuidado y se conecten con otros durante estos tiempos difíciles. La atención a distancia y las estrategias de intervención pueden ayudar a mitigar los efectos negativos.
A pesar de ello ahora se cuenta con nuevos avances tecnológicos que han permitido, encontrar nuevas formas de conectarse con las otras personas, así como se han exacerbado algunos problemas latentes frutos del aislamiento en la cual se han exacerbado problemas de ansiedad y depresión además de problemas ligados a violencia, todo esto ha manifestado la necesidad de encontrar espacios para trabajar estos problemas que se ha optado por servicios de teleconsulta en salud mental, por lo que el DMQ.
Durante la pandemia por COVID-19, se han observado varios efectos en la salud mental en las personas debido al estrés, el aislamiento social, la incertidumbre económica y el miedo a perder la vida. Algunas condiciones de salud mental que han sido más comunes incluyen ansiedad, depresión, estrés postraumático, aumento del consumo de sustancias, trastornos del sueño y vulneración de derechos. Es importante buscar apoyo si experimentan alguna de las dificultades emocionales con el fin de evitar que la sintomatología escale de nivel y sea perjudicial para su salud.
El estudio revela cómo diversas circunstancias asociadas con la pandemia pueden influir en la salud mental, destacando una secuencia de vínculos que van desde la evitación inicial hasta el eventual desarrollo de distanciamiento y enojo en las personas. Esto subraya la importancia de comprender y abordar adecuadamente los impactos psicológicos de la pandemia para promover el bienestar emocional de la población.
La pandemia de la COVID-19 supuso un cambio trascendental en la vida de los seres humanos, donde todos experimentamos, incertidumbre, rutinas diarias alteradas, presiones económicas, y aislamiento social. La preocupación por no enfermar, por cuánto tiempo durará la pandemia, por si el trabajo se verá afectado, qué nos deparará el futuro, el exceso de información, los rumores y la información errónea desencadeno en la población a nivel mundial un impacto psicológico y niveles altos de estrés, síntomas de ansiedad y de depresión. Cuatro años después de la pandemia el impacto en la salud mental de la población sigue siendo evidente y debe ser tema de preocupación de las instituciones de salud de cada país.
Buenas noches, desde Ecuador.
Es crucial abordar las condiciones de salud mental durante la pandemia en Ecuador con empatía y acción. La incertidumbre, el aislamiento y la pérdida han impactado profundamente a muchas personas. Es fundamental que las autoridades prioricen el acceso a servicios de salud mental y promuevan la conciencia sobre la importancia del autocuidado emocional. La solidaridad y el apoyo comunitario son vitales para superar estos desafíos juntos. Ha tenido bastantes repercusiones a nivel de salud mental sobre las problemáticas que han sido consecuencias de todos los problemas se incrementaron, al igual que los síntomas de manera que se ha visto actualmente un deterioro a nivel de aprendizaje representativo. Al igual que la manera en que nos socializamos, ya que ha cambiado mucho desde que se ha usado con mayor prioridad la tecnología.
La pandemia por SARS COV fue muy relevante en el año 2020, puesto que su epidemiología se observa de manera nacional e internacional; los sistemas de salud se saturaron y los profesionales de salud tuvieron sobrecargas de trabajo, días extenuantes donde se realizaba turno de 24 a 48 horas, donde el bienestar y calidad de vida de los profesionales no eran esenciales, se evitaban muertes mediante las atención. salud física, mental fueron desequilibradas por completo y sin contar que también fueron víctimas de esta alteraciones de la salud sus familiares puesto que al estar tiempos prologando sin padres, hermanos o hijos entraban en ansiedad, estrés y desesperación cabe mencionar que en Ecuador los profesionales de salud que desempeñaron su profesión fuera de las ciudades de residencia fueron víctimas de la discriminación por la población al referir como entes e propagación de Covid-19.