Condiciones de salud mental durante la pandemia por COVID-19

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Fuente: 

Chainé, S. M., Montoya, A. L., Maldonado, A. B., Aguirre, A. B., García, R. R., Rosales, F. L., & Cáceres, C. F. (2020). Condiciones de salud mental durante la pandemia por COVID-19. Revista internacional de investigación en adicciones6(2), 11-24.

 

Resumen

 

Introducción: las condiciones por la pandemia del COVID-19 promueven riesgos a la salud mental.

 

Objetivo: se evaluó el nivel de riesgo a desarrollar condiciones de salud mental en función de las situaciones relacionadas con el COVID-19: el confinamiento, síntomas o sospecha de COVID-19, el fallecimiento de personas cercanas, el uso de alcohol y la violencia en el hogar.

 

Método: participaron 8,348 personas de origen mexicano, con un promedio de 25 años (DE =11.24), 50% solteros (4,133), 69% mujeres (5,720), 47% en cuarentena (3,948), 50% parcialmente en cuarentena (4,193) y 3% que no estaba en cuarentena (207). El estudio fue correlacional predictivo ex post facto utilizando la WebApp del Cuestionario para la detección de riesgos a la Salud Mental COVID-19 (Alfa de Cronbach: 0.96; varianza explicada del 64%) programado con Linux®, PHP®, HTML®, CSS®, y JavaScript®. Las variables latentes se derivaron de 124 iteraciones con 103 parámetros (t[496] = 201,464, p=.000), un CFI = 0.921, un TLI = 0.908, un RMSEA = 0.067 (0.066 – 0.068) y un SRMR = 0.051.

 

Resultados: la evitación predijo el estrés agudo, éste predijo la ansiedad de salud; la ansiedad por salud predijo la ansiedad generalizada/tristeza y la somatización; y estas últimas, el distanciamiento/enojo en las personas.

 

Discusión y conclusiones: el confinamiento, la sospecha o tener síntomas, el consumo explosivo de alcohol y reportar violencia emocional o física, se asociaron con los riesgos a la salud mental. Estudios posteriores evaluarán el impacto de estrategias de atención a distancia sobre los riesgos de estrés agudo y postraumático.

 

Palabras clave: salud mental, impacto COVID-19, ansiedad, somatización, violencia.

 

Para conocer más publicaciones, presentaciones, videos y materiales de la Dra. Silvia Morales Chainé, favor de visitar su perfil como investigadora: https://www.issup.net/node/13799

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La pandemia por COVID-19 no sólo ha causado perjuicios a la salud física de millones de personas, sino también un notable deterioro en su salud mental. El confinamiento obligatorio al que fuimos sometidos, empujó a la humanidad al aislamiento social, que actuó como desencadenante de múltiples síntomas relacionados con el estado de ánimo y fue el gatillo para trastornos mentales que se encontraban latentes.

El ser humano, por su naturaleza, necesita de la socialización para mantener un equilibrio en su salud mental, la cual se vio sumamente reducida por la gravedad de la situación sanitaria mundial y nos obligó a acostumbrarnos a las herramientas tecnológicas para sentir algo de cercanía con los nuestros.  Los problemas económicos, derivados de las pérdidas de empleo y el duelo producto del fallecimiento de seres queridos, incrementaron el sentimiento de desesperanza, conduciendo a las personas a un túnel oscuro en el cual miles encontraron como única salida el consumo de drogas o el suicidio.

Las consecuencias de todas las situaciones vividas no sólo influirán en el presente, sino que se extenderán hacia el futuro, motivo por el cual es de suma importancia el reforzamiento de los servicios de Salud Mental, sobre todo en la atención primaria, para dar contención y manejo a la población que así lo amerite y disminuir las potenciales complicaciones que puedan darse a largo plazo.

 

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Saludos cordiales desde Paraguay.

El COVID-19 a reflejado la cruda realidad como por ejemplo la violencia intra familiar, durante el confinamiento, lo que represento un aumento importante del uso y abuso de sustancias, así también las ideas, plan y acción suicida.

La disfunción en el hogar representa un factor de riesgo importante para todos y en especial para los niños y adolescentes para el consumo experimental.

Por otra parte los consumos habituales se profundizaron convirtiendose en consumo problemático, a esto podemos sumar la no admisión de nuevos usuarios en comunidades terapéuticas o programas de desintoxicación lo que agrava aún más la situación de las personas que consumen sustancias.

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https://www.nejm.org/doi/full/10.1056/nejmp2008017

Los pronósticos inciertos, la grave escasez de recursos que se avecina para las pruebas y el tratamiento y para proteger a los socorristas y a los proveedores de atención médica de la infección, la imposición de medidas de salud pública desconocidas que infringen las libertades personales, las grandes y crecientes pérdidas financieras y los mensajes contradictorios de las autoridades se encuentran entre los principales problemas. factores estresantes que sin duda contribuirán a la angustia emocional generalizada y al aumento del riesgo de enfermedad psiquiátrica asociada con Covid-19. Los proveedores de atención médica tienen un papel importante al abordar estos resultados emocionales como parte de la respuesta a la pandemia.

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Buenas tardes, saludos cordiales desde Asunción, Paraguay.

Interesante los planteamientos de todos en este foro, y a modo de compartir experiencias les comento que mi trabajo es en el ámbito penitenciario; me tocó trabajar arduamente en la contención psicológica de los agentes penitenciarios que fueron albergados en diferentes lugares a modo de resguardar la propagación del virus entre los familiares de los mismos, quedando en aislamiento por un mínimo de 21 días, esto trajo consigo la visualización de ansiedad, momentos de enojo y otros problemas de índole de salud mental en el funcionariado. Por otra parte, las personas privadas de libertad, que en su gran mayoría tienen la problemática del consumo de drogas enfrentaron dificultades durante la pandemia, que durante la cuarentana se entorpeció bastante el trabajo del personal de blanco como el servicio de apoyo, ya que no podían ingresar como de costumbre a la población siendo está muy restringida solo a casos de emergencia. En consecuencia a esta medida las personas en tratamiento volvieron al consumo o recaída y algunos empezaron a consumir algún tipo de sustancia toxica ya que la falta de acercamiento familiar durante la pandemia fue un verdadero desafío para el funcionariado y las autoridades. Esto evidenció que el apoyo social es vital para quienes están en etapa de recuperación y más aún teniendo en cuenta el atenuante de estar en una situación de encierro ya que el aislamiento es un factor de riesgo para el consumo, es como tener un doble castigo, al tener esta situación que fue bastante difícil para el Ministerio de Justicia teniendo que buscar una salida y adquirir herramientas como tabletas para hacer videollamadas tanto con los abogados como los familiares a fin de evitar una catástrofe en las prisiones. Si bien los apoyos presenciales que tienen las personas privadas de libertad (pastores, asistencia humanitaria y demás) el apoyo limitado durante la pandemia, las reuniones virtuales de familiares y las consultas con psicólogos, médicos y abogados han expandido esta temática de las herramientas virtuales y han sido de gran apoyo y sumamente útiles. Saludos cordiales

Hola Lilia, saludos desde Panamá, leyendo los comentarios me llama la atención precisamente este, toda vez que no había visualizado la problemática de salud mental y más que todo relacionada a adicciones que podrían estarse experimentando en los centros penitenciarios, aparte sumarle la situación de especial vulnerabilidad que enfrentan las personas privadas de libertad que responde no solo a las deficiencias estructurales que caracterizan los respectivos sistemas penitenciarios de la región originadas en gran medida por los altos niveles de sobrepoblación– sino también a la falta de implementación de medidas de prevención y de respuesta oportunas para evitar la propagación del virus, esto también podría originar temor, miedo, incertidumbre incluso asumo el aumento de problemas en salud mental. Muy interesante, gracias por tu aporte.

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La pandemia por COVID-19 ha provocado no solo daños en la salud de las personas contagiadas y un elevado número de muertes en todo el mundo, sino que ha tenido y está teniendo importantes consecuencias en los ámbitos social y económico, tanto a nivel mundial como local.  Situaciones como problemas de salud física, el aislamiento, la falta de contacto social, la dificultad en la conciliación con la vida personal, los cambios de hábitos, los problemas laborales, etc. con el tiempo traen consecuencias negativas a la salud mental de la población. 

 

Se explica que de acuerdo a estadísticas en Panamá, diez de cada quince pacientes que ingresan a hospitalización en el Instituto de Salud Mental son producto del exceso de consumo de sustancias lícitas e ilícitas. El confinamiento exacerbó las enfermedades mentales, e incrementó los casos de ansiedad en la población. Las secuelas psicológicas y psiquiátricas que deja una crisis, como la pandemia de covid-19 y los arrastres económicos, han exacerbado las patologías de los pacientes, como depresión, ansiedad, trastornos del humor. Sin embargo, el consumo de drogas lícitas e ilícitas se incrementó significativamente. Al inicio de la pandemia también se registró un aumento en los casos de violencia doméstica. El confinamiento y el miedo ante lo que está sucediendo, el terror, la incertidumbre, todos estos factores de no saber lo que iba a pasar, incrementaron las cifras.

 

Es importante mencionar, que la enfermedad del coronavirus (COVID-19) ha afectado a niños y adolescentes tanto de forma directa como indirecta. Más allá de enfermarse, el bienestar social, emocional y mental de muchas personas jóvenes se ha visto afectado por la pandemia. Los trastornos de salud mental a los que se enfrentan en esta etapa del desarrollo pudieran continuar afectándolos durante toda su vida.

El cambio de rutinas, como por ejemplo tener que distanciarse físicamente de familiares y amigos; o la interrupción o modificación del aprendizaje, con entornos de aprendizaje virtuales; el sufrimiento por la omisión de eventos importantes de la vida, como cancelación de planes vacacionales o eventos importantes; mayor exposición a la violencia y daños en línea; afrontar el duelo ante la pérdida de personas significativas en su vida; la incertidumbre con respecto al futuro, son algunos de los retos que enfrentan los niños y jóvenes durante la pandemia del COVID-19.

 

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Otro tema importa a abordar, es que una de cada tres mujeres en el mundo sufre violencia sexual o física, en su mayoría, por parte de su pareja. La violencia contra las mujeres y las niñas constituye una violación de los derechos humanos.

 

Desde que se desató el brote de COVID-19, los nuevos datos e informes que presentan quienes están en primera línea revelan que se ha intensificado todo tipo de violencia contra las mujeres y las niñas, sobre todo, la violencia en el hogar.

Onu Mujeres en un artículo publicado, cuenta que en los últimos 12 meses, 243 millones de mujeres y niñas (de edades entre 15 y 49 años) de todo el mundo han sufrido violencia sexual o física por parte de un compañero sentimental. Y, con el avance de la pandemia del COVID-19, es probable que esta cifra crezca con múltiples efectos en el bienestar de las mujeres, su salud sexual y reproductiva, su salud mental y su capacidad de liderar la recuperación de nuestras sociedades y economías, y de participar en ella.

El problema de la Violencia Doméstica en Panamá, es más común de lo que podemos imaginar. Siendo así que, uno de los últimos reportes estadísticos del Ministerio Público en estos tiempos de pandemia señalan que desde el 1 de enero al 31 de agosto de 2020, sólo en mujeres hay 9,595 casos registrados de violencia doméstica y en menores, entre niñas y niños 1,385 registro de los que son denunciados.

 

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A medida que los países fueron aplicando medidas de prevención de contagios contra el covid 19, se fue  generando una suerte de incertidumbre y ansiedad en la población, lógica pues las preocupaciones o sistemas de alarma del cuerpo se vieron afectadas por todas las situaciones inusuales por las cuales debimos pasar, situaciones desconocidas en este siglo que escaparon a toda predicción y explicación.

Fuimos modificando nuestras vidas de acuerdo a como se iban planteando las situaciones en el mundo, las preocupaciones crecieron y las enfermedades mentales despegaron, las personas con patologías psiquiátricas se exacerbaron, y aparecieron nuevos pacientes con patologías de depresión, ataques de pánico o ansiedad generalizadas, aumento de adicciones, violencia,  cuadros psicóticos, perdida de la memoria , desatención entre otros efectos pos covid  que nos va demostrando esta enfermedad que no solo trae efectos físicos sino también psíquicos, este mal momento generacional que nos tocó vivir recién comienza a mostrar sus efectos en la salud mental mundial.   

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Buenas tardes queridos colegas, les saludo desde Encarnación Paraguay, me gustaría volver a recalcar sobre la situación del COVID-19 y el gran impacto que  ocasiona en diferentes luegares del mundo, y Paraguay no fue la excepción en cuanto a recaidas en el consumo de alguna sustancia, la violencia intrafamiliar y algunos trastornos como la ansiedad, la depresión, el estrés, ataque de pánico y otros transtornos mentales que fue producto de la incertidumbre, el aislamiento y el miedo constante de que nos deparaba? Como expone el material  algunas personas estaban más expuestos a padecer de algún síntoma que afecte su vida cotidiana  y muchos de ellos buscaron ayuda profesional al no ver mejorías, de las cuales en gran parte por primera vez.

Viendo así la necesidad que muchos colegas también hicieron incapie a la importancia de los trabajadores de la salud mental y buscar estrategias para trabajar  en ellas.. Muchas gracias, saludos

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Buenas tardes, coincido con la mayoria de los comentarios ascerca del aumento de las patologias  y del consumo de bebidas alcoholicas en esta pandemia. En mi comunidad que es Encarnacion, Paraguay estubimos trabajando el año pasado y de nuevo en este año conformado un equipo de voluntarios que ofrecimos nuestro tiempo para contener via telefonica por sobre todas las cosas, a las personas ante la situacion de pandemia. Los resultados fueron satisfactorios en el sentido que se pudo visualizar la importancia de nuestra labor por los mas de 1000 casos atendidos en 3 meses el año pasado... el de este año aun no lo hemos cerrado pero en conversacion con los colegas que la integran es mucho menos por que la mayoria (por la aplicacion de la vacuna) a retomado paulatinamente a sus actividades.  

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Expandiendo mi comentario, coincido con el aumento de los casos de violencia intra familiar y casos de suicidio o  intento, que al no poseer sistemas de trabajo mas comprometidos (red, ministerios de justicia, de salud, otros estamentos) evidencia la imperiosa necesidad de replantear las estrategias y aunar esfuerzos para que estos flajelos vayen disminuyendo o en un ideal, desapareciendo. Hay mucho que trabajar, muchas areas en las que debemos capacitarnos por lo que este curso ofrecido me resulta muy ninteresante y espero sea fructifero para conseguir mas herramientas a utilizar 

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La salud mental sigue muy afectada en la actualidad, pese a la flexibilizacion de las medidas sanitarias . Las enfermedades concurrentes aumentaron sobre todo las enfermedades mentales. En toda América latina aumentaron los suicidios y las ideaciones suicidas. En salud mental se tendrá varias secuelas, se debería determinar planes de acción a mediano y largo plazo.

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Buenas tardes. Quisiera comentar sobre este tema que en mi experiencia personal como psiquiatra en formación, uno de los aspectos es el duelo frente el fallecimiento de familiares por COVID, ya que el fenómeno del duelo como proceso adaptativo, se pierden muchos aspectos socioculturales importantes para que este proceso se de, como lo es el acompañamiento y todas las liturgias de despedida implicadas. Con el aislamiento social más estricto al inicio de la pandemia, podíamos ver en las consultas el riesgo de que el duelo se complicara, ya que no existía la oportunidad de despedirse de sus familiares, hasta muchos de ellos se enteraban de la muerte del familias semanas después, también que los familiares encontraban en aislamiento muchas veces, impidiendo el acompañamiento.

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Añadiendo a las condiciones de salud mental relacionadas al COVID, en nuestra institución pudimos ver el aumento de casos de ideaciones e intentos suicidas en personas sin patologías mentales previas; en común presentaban factores psicoestresores relacionadas a la carencia económica vivida en pandemia, extranjeros que no podían regresar al país por confinamiento, historia personal de COVID, entre otras. 

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Se hace evidente el riesgo de la salud mental durante la pandemia por COVID-19, estar expuestos constantemente a una amenaza genero respuestas emocionales desagradables como niveles de estres agudo, ansiedad, depresion... etc. claramente dejo estragos tanto fisicos pero aun mas a nivel emocional.
Lastimosamente las estrategias de afrontamientos no fueron las mas adecuadas debido a la falta de psicoeducación, considero muy pertinente el presente estudio como herramienta para detectar los riesgos a la salud mental durante la pandemia.

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Buenas noches. Saludos desde Panama. Durante la Pandemia como parte de las medidas establecidas por el Ministerio de Salud durante el año 2020, adicional a la restricción de movilidad a nivel nacional, se veto la venta de bebidas alcoholicas durante un tiempo, esto llevo a que muchas personas con dependencia presentaran sintomatologia y cuadros importantes de abstinencia. Pese a las restricciónes horarias de movilidad, seguimos recibiendo casos de pacientes con historia de consumo de otras sustancias como cannabinoides, cocaina o estimulantes. En ocasiones los familiares desconocían como estos las conseguían, sin embargo a la mayoria se les hacian entregas domiciliarias por lo que el distanciamiento y la restricción no afectaban su consumo, y el encierro llevaba a que aumentaran frecuencia y en ocasiones cantidad. En la actualidad ya luego de mas de un año, han continuado personas que desarrollaron trastornos emocionales multifactoriales que presentaron aumento de consumo de sustancias como por ejemplo el alcohol. Otra poblacion afectada durante esta epoca de confinamiento fueron aquellos con patologías cronicas como trastorno bipolar o esquizofrenia, se limito el acceso a seguimientos y la movilidad les hacia dificil poder conseguir sus medicamentos, por lo que muchos presentaron crisis que ameritaron manejo intrahospitalario. 

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https://ijmhs.biomedcentral.com/track/pdf/10.1186/s13033-021-00445-3.pdf

This study identifed a major mental health burden on public health during the time of the COVID19 outbreak in Iran. Females and younger adults are at higher risk of developing mental health problems compared to those who have higher education and those who obtain their information about the disease from scientifc articles and journals. Terefore, establishing a targeted mental health support program, surveillance, and monitoring of consequences of psychological problems during the time of public emergencies such as disease outbreaks is advised.

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https://www.cambridge.org/core/services/aop-cambridge-core/content/view/E2826D643255F9D51896673F205ABF28/S0924933820000358a.pdf/consequences_of_the_covid19_pandemic_on_mental_health_and_implications_for_clinical_practice.pdf

There is a wide consensus that the COVID-19 pandemic not only affects physical health, but also mental health and well-being. The current pandemic is changing priorities for the general population, but it is also challenging the agenda of health professionals, including that of psychiatrists and other mental health professionals. Everywhere in the world, psychiatric clinics are modifying their practice in order to guarantee care and support to persons with mental health problems, but also to those who are not mentally ill and are suffering from the psychosocial consequences of the pandemic. The number of those who will need psychiatric help is going to increase in the next weeks or months, requiring a reconsideration of our current practices. From a psychopathological viewpoint, the current pandemic is a relatively new form of stressor or trauma for mental health professionals. It has been compared with natural disasters, such as earthquakes or tsunamis. But in those cases, the emergencies are usually localized, limited to a specific area and to a given time; people know that they can escape, if they want to or if they have the possibility to do so [6]. It has also been compared with wars and international mass conflicts. But in those circumstances, the enemy is easily recognizable, while in pandemic the “threat” can be everywhere and it can be carried by the person next to us.

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En mi país, Paraguay, la salud mental por la pandemia se vio muy afectada, desde el simple temor de contraer la enfermedad hasta aislamientos extremos. Los pacientes asistidos en urgencias, por covid 19 se encontraban con estrés agudo, además de la fuerte negación al comentarles que podrían estar contagiados, la ansiedad por los resultados del hisopado, aceleraron el proceso del estrés no solo en los familiares de los pacientes. Los médicos de mi país, que asistían directamente a los contagiados, se aislaron de sus familiares por precaución, aumentando en estrés no solo en los personales de blanco, sino también en los familiares de estos. Luego del contagio masivo, la estadía en los hospitales, aislados del mundo y de sus familiares, muchos de los sobrevivientes, presentan dolores musculares, taquicardia, sudoración nocturna, amnesia y temor de acudir a un hospital, presentan estrés pos traumático importante. Las consultas con los sicólogos y con los siquiatras aumentaron y la prescripción de “sedantes” o ansiolíticos, se vieron aumentadas. Hoy en día, las personas ya no se cuidan, creen que con las vacunas ya no es necesario ninguna precaución, y eso aumenta más aún el estrés en los personales de blanco que aún están frente a la batalla.

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Buen día: lamentablemente estos casi dos años de Pandemia han afectado de sobremanera al estado emocional y psíquico de las personas que han tenido Covid y de las que no. Por un lado los sobrevivientes de la enfermedad siguen padeciendo secuelas a nivel emocional , muchas consultas pos pandemia por cuadros de ansiedad , pánico y el TEPT . En otros la culpa de haber perdido a uno o mas miembros de la familia y el no poder entender porque el o ella sobrevivió, además de haber quedado con innumerables deudas . En aquellos que no han contraído el virus el hecho del confinamiento por tanto tiempo, perdida de la socialización , perdida del empleo, los niños y adolescentes no ir a la Escuela o Colegios ,negocios cerrados , horarios restringidos en fin un sin numero de secuelas quedan de lo experimentado hasta ahora y la incertidumbre del no saber si esto haya terminado o no. En este tiempo de cuarentena ,hubo un aumento de consultas psicológicas tras el  el consumo de alcohol y otras drogas,  violencia intrafamiliar,  rupturas matrimoniales  , intentos de suicidio , depresiones severas ,soledad insoportable que los sumiò en el exceso del uso de redes sociales ingresando a paginas no recomendables .La afección de vivir tan limitados por tanto tiempo genero en las personas diversos efectos pos pandemia a nivel emocional y psíquico , evidentemente antes de todo esto cada miembro de la familia vivía su mundo y no nos acostumbramos a la convivencia familiar dejamos que la tecnología nos superara y separara de lo mas valioso que son las buenas costumbres y los valores , como así también el amor y el respeto hacia la FAMILIA

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En Paraguay, los trastornos pos covid, llevan a muchos pacientes a ser asistidos en consultorios externos por ansiedad, estrés pos traumático, dolores corporales refractarios al tratamiento con analgésicos, insomnio y hasta depresión. Los sicólogos y siquiatras tienen más pacientes a causa de esta pandemia.

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Los resultados de estudios confirman el aumento progresivo de la inestabilidad emocional, podemos decir que dicho aumento fue consecuencia del confinamiento. Además del aumento de casos es muy notorio la falta de recursos y herramientas para afrontamiento que carece las personas.

Es importante que estas investigaciones nos lleven a crear políticas y programas para el entrenamiento de las mejoras para la salud mental. 

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Buenas tardes, saludos. Escribo desde Encarnación, Paraguay. 

Nuestra ciudad es fronteriza con la ciudad de Posadas, República Argentina cuya frontera aun permanece cerrada por la pandemia desde el mes de marzo de 2020. Cómo es una ciudad fronteriza, la economía se basa principalmente en el comercio y el turismo dependiente prácticamente de los turistas argentinos que por las razones mencionadas, generó el casi nulo movimiento comercial lo que a su vez ocasionó una situación de desempleo importante. Esta situación de desempleo, el confinamiento, el miedo a ser contagiado y la situación real epidemiológica que atravesó nuestro departamento (Itapúa) ha generado que las personas aumenten el consumo de sustancias, especialmente alcohol, marihuana, cocaína, etc. según se pudo evidenciar en los centros de atención ambulatorios. Entre las razones que mencionaron los consultantes se pueden destacar las siguientes:

  1. Mucho tiempo libre.
  2. Angustia por falta de ingresos.
  3. Deudas sin cubrir por falta de ingresos.
  4. Conflictos familiares que aumentaron al verse obligados los miembros a convivir por más tiempo en espacios reducidos en muchos casos.
  5. La ayuda social brindada por el gobierno que permitía el canje por bebidas alcohólicas sin restricciones.
  6. La pérdida de personas importantes en la vida del paciente. 
  7. La escasa tolerancia a la frustración, etc.

En mucho de los casos, los consultantes mencionaron haber aumentado su consumo de sustancias desde los primeros tiempos de las restricciones y encontrándose al momento de la consulta en situaciones estresantes por no considerar que lo que realmente hicieron fue agregar un problema más al entorno familiar y tal vez el más grave porque nuestro país brinda muy poca atención a la problemática del consumo de sustancias. 

Considero que ahora que la situación epidemiológica se encuentra controlada, es cuando recién van a ir en aumento las consultas por los problemas de salud mental teniendo que en cuenta el levantamiento progresivo de las restricciones que a su vez evidenciará muchas otras problemáticas sociales. 

 

 

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La incertidumbre asociada con esta enfermedad, más el efecto del distanciamiento social, el aislamiento y la cuarentena, pueden agravar la salud mental de la población; dicha situación también puede afectar al personal de la salud.

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Es frecuente que los trabajadores de la salud experimenten: miedo, pena, frustración, culpa, agotamiento y ansiedad, en relación con un mayor número de horas de trabajo y el desbordamiento en la demanda asistencial .

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En relación a este tema es sumamente interesante ya que el covid 19 esta siendo un reto en nuestro actual vivir, así como de evitacion, amenaza, depresión,  miedo, angustia, convirtiéndose verdaderamente como dicen los estudios realizados en un estrés postraumático, que se está generando como respuesta automática, siendo una consecuencia por miedo a exponerse al factor de riesgo de tener covid 19. ahora los profesionales de la salud metal tenemos un gran reto en cuanto a generar la intervención, la orientación o la guia  y promover estrategias que ayuden a restablecer la óptima salud mental. Asi mismo es evidente que no ayudan  mucho los problemas asociados como la ingesta de drogas, la violencia intrafamiliar, etc. Por ejemplo, en el estado de Oaxaca lo que hemos atendido son varios casos de depresión, ansiedad, riesgo suicida, lo que confirma la relación causal entre las variables latentes como; estrés agudo distanciamiento/enojo, ansiedad, somatización, y duelos por familiares fallecidos por covid 19. Creo es indispensable trabajar con la psicoeducación; nuevos estilos de vida saludables por ejemplo: el tener una rutina de ejercicio en casa en familia, hábitos de lectura, practica de valores en la familia asi como las artes,  etc, esto para ayudar al cerebro a producir los neurotrasmisores que nos mantengan saludables como la dopamina, serotonina, acetilcolina, endorfinas etc, sabemos que la adaptación a este  nuevo estilo de vida es todo un reto, y se necesita de la flexibilidad mental que podamos poseer, sin omitir la  información científica relacionada a la prevención de esta enfermedad, ya que en la cultura mexicana se suele caer fácilmente en el extremo de confianza en que no pasara a mayores, hasta que sucede como lo estamos viviendo en la actualidad, así como falta de disciplina para seguir con las medidas sanitarias, pero esto se da a mi parecer por falta de programas que ayuden a la prevención, ya que el gobierno mexicano a mi parecer se deja llevar por interés personales, y de política, sin tener como prioridad el mantener las medidas sanitarias como tal, por ejemplo acá se vivió la elección del nuevo  candidato municipal y hubo eventos y demás acciones que pusieron en riesgo la salud de muchas personas, más  la falta de criterio de muchas personas que se dejaron llevar por  dichos eventos sociales, ahora,  algunas personas están luchando por su vida en esta tercera ola. Hay mucho por trabajar y accionar como profesionales de la salud desde la trinchera en la que servimos o deseamos accionar.  

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Buenas noches, muy interesante y actual el tema planteado. Considero que a nivel mundial la crisis a causa del Covid 19 afecto a todos de manera similar. Particularmente en mi país (Paraguay), la gente al principio no pensaba que nos podría llegar a afectar, por más que los medios de comunicación nos llenaban de noticias devastadoras, hasta que en el mes de marzo 2020, después del primer caso y fallecido se impuso la cuarentena, con medidas muy estrictas, la gente entro en pánico, nadie quería, ni podía  decir que tenía la enfermedad, la discriminación y la falta de empatía fue en aumento.  El encierro, la convivencia forzada, los niños y adolescentes  en casa teniendo que dar clases virtuales, que nadie estaba preparado, ni familiarizado; muchos perdieron sus empleos, la falta de ingreso, la incertidumbre y el terror ante lo desconocido, la falta de un tratamiento específico para la enfermedad, causo mucho stress, angustia,  desesperación, enojo, tristeza, aburrimiento, negación de la realidad (pandemia inventada, que la enfermedad no existía);  se produjeron cambios de conducta en la alimentación,  aumento de consumo de alcohol, cambios en la rutina del sueño,  aumentaron las dificultades en el relacionamiento  interpersonal, mayor indice de violencia intrafamiliar. 

Todo esto llevo a que, en los hospitales y Centros de Salud la atención en salud mental tenga gran demanda, las atenciones se realizaron principalmente de manera telemática, y también los profesionales tuvimos que adecuarnos ante la demanda y la realidad. 

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Desde el inicio de la pandemia, a las personas a causado mucha insertidumbre todo lo relacionado con el aislamiento, el encierro, el cuidado extremo, que eso causó un agotamiento mental, físico.. Creo una ansiedad y desesperación por saber que pasaría en un futuro, la sobre información que se adquiría desde los distintos medios de comunicación ponían en evidencia cuanta agonía pasaban las personas. 

En este tiempo se puede decir que a causado muchos daños en el ámbito de la salud mental,dificultades que de apoco se está venciendo. 

SALUDOS CORDIALES DESDE PERÚ

ME PARECE UNA APRECIACION OBJETIVA Y ME SUMO A ELLO, SIN EMBARGO CABE MENCIONAR TAMBIEN QUE COMO MENCIONAS ESTA SOBRE INFORMACION DE NOTICIAS Y EN MUCHOS CASOS PSEUDO NOTICIAS QUE CONTENIAN INFORMACION TOTALMENTE FALSA O QUE SIMPLEMENTE NO CONTENIAN INFORMACION REAL Y QUE PERSONAS INESCRUPULOSAS JUGANDO CON LA SUCEPTIBILIDAD Y ESTADO EMOCIONAL DE LAS PERSONAS SE PRESTAN A REPLICAR ESTA “INFORMACION” Y LOS USUARIOS (AS) FINALES PUES SE INFORMABAN DE FUENTES NO CONFIABLES SUMANDO A QUE PAREZCAN PRIMEROS SIGNOS Y SINTOMAS DE TRASTORNOS MENTALES O AFIANZANDO ELLO EN LA PERSONAS QUE LA TIENEN UN DIAGNOSTICO EN SALUD MENTAL.

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Desde el inicio de la pandemia, a las personas a causado mucha insertidumbre todo lo relacionado con el aislamiento, el encierro, el cuidado extremo, que eso causó un agotamiento mental, físico.. Creo una ansiedad y desesperación por saber que pasaría en un futuro, la sobre información que se adquiría desde los distintos medios de comunicación ponían en evidencia cuanta agonía pasaban las personas. 

En este tiempo se puede decir que a causado muchos daños en el ámbito de la salud mental,dificultades que de apoco se está venciendo. 

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Inicialmente el brote del SARS‐CoV‐2 en China causó alarma y estrés en la población general. El miedo a la enfermedad se podría explicar por la novedad e incertidumbre que genera. El miedo se exacerbó por los mitos y por la desinformación en las redes sociales y medios de comunicación, a menudo impulsado por noticias erróneas y por la mala comprensión de los mensajes relacionados al cuidado de la salud. Además, la cuarentena incrementa la posibilidad de problemas psicológicos y mentales, principalmente por el distanciamiento entre las personas. En ausencia de comunicación interpersonal, es más probable que los trastornos depresivos y ansiosos ocurran o empeoren.

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La pandemia de la COVID-19 probablemente ha cambiado mucho la manera en que vives tu vida, y con esto ha traído incertidumbre, rutinas diarias alteradas, presiones económicas, y aislamiento social. Quizás te preocupes por enfermarte, por cuánto tiempo durará la pandemia, y qué nos traerá el futuro. Durante la pandemia de la COVID-19 quizás sientas estrés, ansiedad, miedo, tristeza, y soledad. Las encuestas muestran un aumento de importancia en el número de adultos en los Estados Unidos que reportan síntomas de estrés, ansiedad, y depresión durante la pandemia comparado con las encuestas previas a la pandemia.

Algunas personas han aumentado su consumo de alcohol o drogas, pensando que pueden ayudarlos a afrontar sus miedos sobre la pandemia.

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Buenos Días. 

Con respecto al aumento de casos de problemas de salud mental ,según mi experiencia en la unidad de salud familiar donde presto servicio, Las cifras de consultas por angustia, insomnio, falta de apetito  y otras características aun aumentado durante el confinamiento.

La investigación en cuestión nos muestra que los problemas de salud mental han ido en aumento, por esa razón considero que es de extrema urgencia potenciar la resiliencia e implementar políticas públicas para el desarrollo personal y el cuidado de la salud mental.

 Muchas Gracias. Saludos desde Paraguay.

 

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En el estado de emergencia en el que actualmente vivimos por la COVID - 19  a generado daños en la salud mental en las diferentes etapas de vida a nivel regional, nacional y mundial, esta emergencia sanitaria a sido y es de gran impacto por que trajo muertes y secuelas en la salud de algunas personas, asimismo daños sociales y económicos, de modo que la depresión y la ansiedad son los principales problemas que se ha incrementado desde el inicio de la pandemia y entre otras personas han desarrollado a raiz de la pandemia. Debido a esta cuarentena las personas han generado diversos síntomas  como miedo, angustia, stress, tristeza y entre otros. En ese sentido nuestros Centros de Salud Mental Comunitaria  vienen trabajando para promover una mejor convivencia saludable a través de las Guías técnicas del Cuidado de la Salud de la población en este contexto como también del profesional de salud. 

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A lo largo de la historia se han vivido diferente crisis sanitarias pero esta pandemia tiene caracteristicas diferentes, la sobreinformación ha llevado a las personas a un estado de incertidumbre y para sentir el control los ha llevado a un consumo masivo de comida, alcohol, jabon o cualquier cosa de uso personal. Además de la polarización de las medidas de contacto, que ha llevado a las personas a un cuidado excesivo para evitar el contagio o la despreocupación/negación de que no le va a pasar a uno. Poco a poco se ha ido dando el proceso de adaptación pero en el camino se ha visto afectada nuestra salud mental enormemente por el distanciamiento social más que por el físico.

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La población más afectada han sido los extremos etarios. Los niños porque requieren de la socialización para su crecimiento y es vital para el desarrollo de destrezas motoras y del lenguaje. Los adultos mayores porque requieren la socialización como medida para evitar procesos demenciales, sin mencionar a los que han tenido perdidas familiares y estan pasando por un duelo.

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Efectivamente se puede evidenciar que se incremento el consumo de alcohol y el riesgo de violencia en el hogar, esto obedece  a la cuarentena y/o confinamiento, asimismo se pudo evidenciar que en la Región Junín los problemas de ansiedad y depresión se incremento en un 25 % en el periodo 2020 a comparación a los años anteriores, identificando a su vez somatización, trastornos de adaptación sobre todo en adolescentes, estrés agudo y post trauma.

Podemos señalar que nos encontramos en una emergencia sanitaria de gran impacto en la que se ve amenazada la vida de la personas, y que puede causar cantidades significativas de enfermos y muertes.

Estas situaciones de cambio de rutina en la vida de las personas es constante porque es algo nuevo y  por que el riesgo de contagios es permanente y esto amenaza constantemente la vida de las personas.  Debido a ello se puedo encontrar problemas psicosociales, es por ello lo importante que debemos cuidar nuestra salud mental con diversas herramientas a nivel físico, emocional, económico, psicológico y social.

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En el Perú, durante la pandemia del Covid 19 evidenció la realidad de la salud y deterioró más el sistema de Gobierno Estatal, tuvo varios presidentes, alta ansiedad en los principales funcionarios de confianza del gobierno de turno evidenciándose el aprovechamiento del cargo que desempeñaban para vacunarse primeros la Vacuna Contra el Covid 19, prevenir la muerte a toda costa no les importó las consecuencias y otros hechos conocidos por la población en general.

 Durante la pandemia del Covid 19 todos los países dictaron medidas preventivas contra el Covid19 de acuerdo a su realidad e intereses, el Perú también dicto medidas preventivas oportuno o no oportuno? la población tiene la respuesta, si bien es cierto que las medidas preventivas dictadas por los gobiernos de turnos ayudo a reducir el contagio de la pandemia del Covid19, pero también ayudo a incrementar más patologías las personas que tenían enfermedades preexistentes complicaron su salud, otros que en paz descansan y generaron otras enfermedades, las patologías halladas también fueron el estrés, ansiedad, depresión, pensamientos negativos, desesperanza, consumo de drogas y otros que fueron atendidas con las condiciones existentes.

 El Perú, es un país subdesarrollado y de hecho su desarrollo depende de países desarrollados, de empresas trasnacionales de poder económico y peruanos que gobiernan de corazón para los peruanos y por la vida global.

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Sin duda esta pandemia trajo consigo la visibilidad en la falta de cuidados en la salud mental como también lo que viene observandose un aumento de síntomas de ansiedad, estrés, depresión y otros, estos no solo por las restricciones de cuidado sino también por los cambios en los hábitos, pocas personas tienen hábitos de autocuidados por lo que estar en casa encerrados y seguir teniendo las responsabilidades laborales o el perder el empleo sin duda muchos se vieron en enfrentar dichas situaciones de una manera no tan adecuada para la salud tanto física como emocional.   

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Es importante señalar que a medida que pasa el tiempo en el contexto de la pandemia han ido aplicando medidas para restringir los tendencias con el fin de reducir el número de infecciones por el virus de la COVID-19, cada vez más personas estamos cambiando radicalmente nuestra rutina cotidiana.

Las nuevas realidades del teletrabajo, el desempleo temporal, la enseñanza en casa y la falta de contacto físico con familiares, amigos y colegas requieren tiempo para acostumbrarse. Adaptarnos a estos cambios en los hábitos de vida y enfrentarnos al temor de contraer la COVID-19 y a la preocupación por las personas próximas más vulnerables es difícil, y puede resultar especialmente duro para las personas con trastornos de salud mental es por ello importante la implementación de los Centros de Salud Mental Comunitario para poder abordar estos problemas que cada vez están en aumento.

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La pandemia en Paraguay particularmente puso en evidencia la paupérrima situación de nuestro sistema de salud. La escasa disponibilidad de camas, infraestructura precaria, malas condiciones laborales para el personal de blanco-salud, aumentó la ya acostumbrada inseguridad en todos los sentidos. El desempleo escaló a niveles no hasta antes conocidos y empezaron a dominar en las consultas pacientes con cuadros depresivos y ansiosos. Asimismo, el encierro generó aumento de las situaciones de violencia en el hogar y aumento en el consumo de alcohol. Sin embargo, subjetivamente, por la ausencia de información epidemiológica fiable, las consultas presenciales de pacientes que consultaron por trastornos por uso de sustancias, aunque reducidas en su número, mostraron comportamiento similar a meses antes de la pandemia. La videoconsulta logró en cierta medida paliar la necesidad de atención especializada a pacientes con diversos cuadros. Es de reconocer que el acceso a esta modalidad de consulta exige condiciones mínimas tecnológicas que determinan la calidad de la comunicación. Lamentablemente gran parte de nuestra población no dispone de estos recursos.

Muy interesante comentario, se pudo evidenciar que nos queda mucho trabajo por realizar en especial en el ámbito de salud, pero toda crisis trae cambios consigo y creo que nos permitió reinventarnos y la teleconsulta nos ha permitido realizar el acompañamiento de los usuarios en este tiempo. 

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Buenas noches. Desde mi experiencia en consultorio atendiendo pacientes con trastornos por uso de sustancias, lo que también me llamo la atención a parte de coincidir en todo lo relacionado al estudio realizado, es que muchas de las personas no volvieron a la consulta y presentaron recaídas graves. Tal vez esto por la disminución en la disponibilidad de conseguir turnos o tal vez por el miedo en contagiarse. Pero viendo de nuevo a muchos que vuelven ahora se nota que la pandemia género muchos problemas en la salud mental y veremos más consecuencias a lo largo del tiempo 

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definitivamente es importante seguir generando planes de acción para el cuidado de la salud metal, por que luego del covid -19, la falta de la misma será nuestro mayo problema dentro de la sociedad.

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La condición definitivamente que mas ha afectado la salud mental , durante el covid-19, han sido aquellos como la ansiedad, la depresión, los síndrome de abstinencia por la falta del consumo del alcohol, la violencia domestica, esto durante el confinamiento y luego del mismo. Lo que nos deja en evidencia el poco cuidado que hemo tenido con la salud mental y la importancia de establecer políticas de estado para el abordaje y cuidado de la misma.

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Buenas noches. Definitivamente este tema a sido vivido y evidenciado por cada de uno de nosotros. En mi caso personal e podido apreciar y vivir el estrés padecido por nuestros compañeros de trabajo en contacto o no con pacientes enfermos con Covid-19. Se necesito implementar evaluaciones de carácter obligatorio a todo nuestro personal para así poder detectar los niveles de ansiedad presentado que al final repercuten en nuestras familias y pacientes. La perdida de compañeros de trabajo, largas jornadas y el miedo de enfermar a sus familias fue lo mas frecuentemente evidenciado. El seguimiento y monitoreo psicológico a sido invaluable para afrontar este reto. 

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Otra situación fuertemente evidenciada durante la cuarentena han sido la necesidad o los síntomas de abstinencia a sustancias como el alcohol. Sin bien es cierto las personas aumentaron el consumo de alcohol en sus viviendas, la realización de fiestas clandestinas para libar alcohol y muy probablemente otras sustancias se han convertido en un problema de salud publica. La falta de medidas de bioseguridad, violación a los decretos de aislamiento social aunado a la perdida de miles de empleos empeoro los indices de contagio en todos los sectores del país.

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Un placer saludarles desde Encarnación / Paraguay 

La pandemia genero un impacto a  la salud mental de la población en general,

El temor de contraer el virus a esto se suma el embate de los importantes cambios en nuestra vida cotidiana provocados por los esfuerzos para contener y frenar la propagación del virus, el distanciamiento fisico, el desempleo temporal, la educación de los niños, la muerte de amigos y familiares, todo esto genero un gran aumento en el consumo de  crack, cocaína y benzodiacepinas de esto se tiene evidencia en los  centros de tratamiento de adicciones, este  gran aumento de consumo esta aparejado con violencia intrafamiliar, ansiedad y depresión, ruptura de parejas, problemas economicos.

Los mas afectados son nuestros jóvenes y niños ya que son los mas vulnerables 

Para sobrellevar estas y otras situaciones de la población fue sumamente importante el soporte psicológico, profesionales de salud mental se van visto desafiados a hacer contención on line y mejorar las técnicas con la tecnología para que sea efectiva la atención.

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Buenas noches desde Perú

Condiciones de salud mental durante la pandemia por COVID-19.

  • Este tema , a salido a luz en tos tiempo de confinamiento , ya que en muchos Países no se encontraban preparados para enfrentar  los problemas de salud mental , ya que  no le brinda la  importancia , frentes esto los problemas se fueron agudizando , entre esto: la violencia  hacia las mujeres y los integrantes del grupo familiar , feminicidios, Estrés, Depresión, el consumo de alcohol y drogas en personas que ya  consumían se a  incremento. los intentos de suicidio, asimismo otro condicionante  es la tecnología, ya que muchos padres optaron por brindar un equipo  inteligente a sus hijos por tema de clases virtual el cual se a vuelto una barrera para la comunicación ya que muchos de ellos niños , adolescentes han  desarrollo dependencia a estos aparatos, incluido los juegos o video juegos . 
  • La COVID-19 repercute negativamente sobre la salud mental de las personas de la población en general, y en particular, sobre los grupos poblacionales más vulnerables. 
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Buenas noches, saludos desde Perú. 

Frente al origen de la pandemia por la COVID – 19, resulta fundamental evaluar y manejar crisis psicológicas, conductas impulsivas y de riesgo en la población, para prevenir crisis de ansiedad y problemas emocionales, además de reducir el estrés en esta pandemia. Dentro de los riesgos esperados se encuentra el estrés agudo y las condiciones emocionales. Las personas muestran condiciones de estrés y crisis, entre las que se encuentran la fatiga, los problemas de sueño, la irritabilidad, los problemas de atención y el miedo, que pueden llegar hasta el consumo de sustancias y la violencia. Otros casos: pérdida de interés, deseos de hacerse daño, dificultad para dormir y poner atención. En función del confinamiento, del uso de alcohol y la violencia en el hogar. La exposición al riesgo a padecer coronavirus parece generar ansiedad por el riesgo a enfermar o morir, desesperanza, culpa por que otros enfermen y su asociación con otras condiciones de riesgo a la salud mental.  Las consecuencias frente a este proceso (que en un principio no estuvimos preparados), nos llevó a un cuadro elevado de estrés y ansiedad, perjudicando nuestra salud mental y afectando a las personas que nos rodean. Las dificultades económicas se agregaron a los problemas de salud física y psicológica; siendo un resultado grave para la humanidad. Frente a ello, los estudios, apoyo psicológico y los medios de comunicación, no fueron suficiente y todo dependía del clima familiar y personal.